Borrar

Andan los labradores que trinan, y no precisamente como los jilgueros. Algunos afirman que, a pocos días que el tiempo siga así, buena parte del cereal va a irse al garete. Los abuelos de antes contaban y no paraban acerca de lo mucho que ... llovía y nevaba, tanto que a los novios no les importaba ir a ligar con su amada aunque arrostraran más dificultades que las tropas de Hitler -incluida la División Azul- en la campaña de Rusia; lo demuestra la jota: «Aunque nevaba y llovía,/ atravesé las Bardenas,/ pero, como te iba a ver, / me pareció primavera».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja El señor de la varita mágica