Murcia se parece a furcia y murciano a marciano. Supongo que es una de las razones por las que resulta difícil ofendernos. Aunque fuera prohibida en España después del artículo de L'Osservatore Romano, que la llamaba atea y blasfema, cuentan que cuando Franco vio ' ... Viridiana' su comentario fue: «Estos extranjeros se asustan de todo, pero si solo son chistes de baturros». Murcianos, baturros, da igual.

Publicidad

Ha vuelto a la actualidad (TikTok la ha recuperado) una cita de 'First Dates' con un chico de Murcia y una chica de Barcelona que lo invitó a su ciudad. Él correspondió. Ella: «No sé ni cómo ir». Y luego «¿Está en Andalucía esto?». En 'La Roca' metieron en un lío a Juan del Val, echándole encima a un monologuista que utiliza al público en sus actuaciones, cosa que Juan había criticado. Al final: «Me voy ahora a actuar a Murcia. Tú no sabes ni lo que es Murcia.». La idea de Murcia como Shangri-La. Algo oculto. Cómo nos vamos a ofender.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

¡Oferta 136 Aniversario!

Publicidad