Reapertura, dudas y tensión

Aunque las cifras de la pandemia siguen instaladas en niveles muy preocupantes, la relativa mejoría de la situación en la capital riojana ha permitido al Gobierno relajar algunas de las medidas restrictivas que había adoptado hace un mes. La reapertura de las terrazas y la ... posibilidad de consumir en el interior de bares y restaurantes –aunque no en barra– ofrece un respiro a un sector muy castigado, que también ha recibido con alivio el retraso del toque de queda hasta las once de la noche. Los propios hosteleros son los más interesados en que la apertura discurra sin sobresaltos y por eso reclaman la colaboración ciudadana. Un nuevo cierre supondría la puntilla para muchos establecimientos. Sin embargo, los indicadores en Arnedo siguen situados en cotas exageradas, por lo que la Consejería ha decidido prolongar la clausura. La continuación de las restricciones ha generado mucha tensión en la ciudad del calzado, en parte porque, al parecer, el Gobierno olvidó añadir en su comparecencia que la situación se sometería a revisión continua. El propio alcalde arnedano, Javier Ibáñez, saltó enfurecido en las redes sociales, aunque, equivocando el tiro, dio a entender que el error se había debido a una «mala interpretación» de los medios y no, como sucedió realmente, a una deficiente información del Ejecutivo.