Raquel se queda sola

En el otro lado, los dos miembros del PSOE en la Mesa se enfrentan a una crucial disyuntiva: o aceptar la interpretación que del acuerdo antitránsfugas pregona el Gobierno regional (y abstenerse o votar en contra) o atenerse a la letra y al espíritu del pacto y apoyar la propuesta de IU. En cualquier caso, un compromiso que pone al Grupo Socialista del Parlamento riojano frente a la realidad sobrevenida tras la expulsión de Raquel Romero del partido por el que fue elegida y que va más allá, por su trascedencia, de las lecturas que de este hecho se hacen, a medida, desde el Gobierno.

Y aunque lo que se sustancia en la votación de este jueves afecta solo a la condición de diputada de Raquel Romero, y nada menos que a eso, el resultado debe ir más allá de los muros del Parlamento. Porque, de prosperar la iniciativa de Henar Moreno, se 'oficializaría' la condición de tránsfuga de quien también es consejera del Ejecutivo de Concha Andreu y dejaría a esta frente a la encrucijada de mantenerla en su Gabinete con ese estigma o cesarla y poner en peligro la aritmética parlamentaria que la sostiene. Un dilema que, en este caso, compete a ella, y solo a ella, resolver. Pues tanto es prerrogativa de la presidenta el nombramiento de las personas que considere convenientes para formar parte de su Gobierno como su destitución cuando se altere esa conveniencia, como previsiblemente provocará este jueves una votación en la sede regional de la soberanía popular.