Borrar

Hay una parte de infantilismo en ponerle nombre a las borrascas, una cierta reducción de un fenómeno complejo para transformarlo en otra cosa, seguramente más cercana al espectáculo y al entretenimiento que al curso normal de la naturaleza. Filomena es el último ejemplo de esta ... moda de nombrarlo todo, y no sé si esto es bueno o malo o sólo un signo de los tiempos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja Que no sé