Sin público en las gradas

El Consejo Superior de Deportes alentó la pasada semana una posible vuelta de los aficionados a los estadios de fútbol en la recta final de la Liga con restricciones de aforo y drásticas medidas preventivas. El ministro de Cultura, del que depende ese organismo, no ha tardado en echar por tierra la propuesta al entender que no se dan las condiciones sanitarias adecuadas. La pandemia sigue lejos de estar controlada, con el agravante de que las fuertes diferencias en su evolución en las distintas comunidades dificulta adoptar una decisión común a todas ellas. El lógico interés de los clubes de fútbol en contar con público en sus gradas choca con la cautela que impone la persistencia del virus. Parece preferible esperar a que el avance de la vacunación permita dar nuevos pasos al inicio de la próxima temporada que correr ahora riesgos innecesarios, aunque los dispares criterios autonómicos en materia de eventos –conciertos, toros...– son una fuente de repetidas contradicciones. A 40 días de la celebración de la Eurocopa, arrebatada a Bilbao por no asegurar la presencia de hinchas, esta sigue sin estar garantizada en La Cartuja de Sevilla.