LE PROMETO QUE LO INTENTAMOS

Le prometo, a usted que está al otro lado de estas líneas, que los que estamos a este lado lo intentamos. Y mucho. Pero es que no es fácil. Sabemos que una campaña electoral es larga (así que no veas ahora que han sido ... dos), que entre precampañas y postcamapañas se nos va la legislatura completa, que la desafección política es cada vez mayor y que los políticos se ponen cada vez más pesados. Que entre encuestas, declaraciones sin sentido, mítines sólo para quienes tienen ya el voto decidido, promesas que no se cumplirán y ataques gratuitos entre candidatos, a usted se le va la paciencia. Y nosotros, desde este lado, lo notamos y lo comprendemos. Así que, de verdad, les juro que intentamos hacérselo más llevadero con fotomatones, crónicas de ambiente, chascarrillos de campaña... Nos gusta imaginarle leyéndonos y asintiendo a modo de interés. Pero es que no es fácil. Porque lo mismo que el otro día una amiga que asegura leerse el periódico me preguntaba quiénes se presentan a la alcaldía de Logroño, otro me echaba la bronca porque no sacábamos esto o aquello que había dicho no sé quién. Y es que el término medio es complicado. Pero mucho. Hay que mediar entre quienes quieren saber, pero en plan «oye, no te pases de política, que me aburro» y quienes nunca tienen suficiente. Y luego están esas manos negras que algunos se empeñan en ver que tenemos detrás. «Buf, baja un poco el bloque electoral que llevamos un mes abriendo con elecciones, y lo que queda», comentábamos entre campaña y campaña en larioja.com. Poco después un lector nos recriminaba que no queríamos darle bombo a la derrota del PP. Pero es que otro nos dijo que no queríamos hablar de elecciones para evitar que el PSOE gane en las autonómicas. Ya ve usted qué complejo: misma acción, opuesta visión de los lectores.