Prioritaria unidad de acción

La unidad de acción entre todas las administraciones, al margen de las siglas políticas de sus dirigentes y de sus legítimas discrepancias con la actuación del Gobierno, resulta determinante para ganar la guerra declarada al coronavirus. De ahí que el compromiso en ese sentido asumido ... ayer por los presidentes autonómicos en la reunión por videoconferencia mantenida con Pedro Sánchez deba prevalecer sobre las críticas lanzadas por Iñigo Urkullu y Quim Torra a propósito de la «invasión de competencias» que conlleva el estado de alarma o los reproches de barones del PP por la tardía intervención de Ejecutivo. Sánchez habrá de preservar el máximo consenso valorando la eventualidad de que algunas comunidades vean necesario arbitrar medidas más restrictivas. Sería una temeridad aplicar el decreto desde la más centralista de las interpretaciones posibles sin tener en cuenta que la eficacia, la eficiencia y la operatividad del Estado actual –radicalmente distinto al que en 1981 promulgó la ley orgánica vigente– se basan en su naturaleza autonómica. Por último, resultaría inconveniente alimentar un pulso larvado entre instituciones durante la crisis a la espera de un ajuste de cuentas político final.