Perdones imposibles

El «México» al que se refiere López Obrador fue el antiguo imperio mexica, liquidado en 1521 con la caída de Tenochtitlan y la muerte de su tlatoani Moctezuma II Xocoyotzin. Lo que no dice es que a los mexicas los derrotó un ejército integrado en un 99% por otros pueblos indígenas (tlaxcaltecas, totonacas, cholultecas, chalcas, texcocanos y huejotzingas), sojuzgados por aquellos, que Hernán Cortés supo aglutinar contra sus opresores. Por tanto, el señor AMLO debería exigir también (1) que los mexicas pidieran perdón a los otros pueblos mesoamericanos que los combatieron, (2) que estos pidieran perdón a su vez a los mexicas por haberlos derrotado y (3) que él mismo pidiera perdón a todos por ser descendiente de españoles. Los cuales, a su vez, deberíamos pedir perdón a los musulmanes por la Reconquista, pero estos también a los visigodos por hacer lo mismo ocho siglos antes, y estos a los hispanorromanos por idéntico motivo. Claro que entonces también deberíamos reclamar disculpas a Francia por habernos invadido, a Roma por habernos ocupado y estos a fenicios y cartagineses, cuyos descendientes harían bien reivindicando resarcimientos a Grecia por haberlos echado de Troya, y los griegos a Turquía por someterlos durante siglos, y de las conquistas de Ciro el Grande, Alejandro, Atila o Gengis Khan ni hablamos. De seguir por este camino, el planeta será un clamor universal de acusaciones retroactivas, perdones imposibles y rencores trasnochados.

Como nuestro precoz monarca ni le ha contestado a López Obrador, otro que tal baila, el argentino descendiente de los romanos que sometieron a Hispania Jorge Mario Bergoglio, alias Francisco, se ha encargado de pedir perdón a México por los «pecados cometidos en la Conquista española». Quizás ambos ignoren que un descendiente directo de Moctezuma en undécima generación, Francisco Javier Girón Ezpeleta, II Duque de Ahumada, fundó la Guardia Civil en 1844. Así que, cuando la DGT le multe a usted por circular a 121 por la autopista (pero no a 156, se conoce), dirija su pliego de descargos al señor AMLO exigiéndole responsabilidad por los abusos cometidos por los herederos de sus antepasados. Los cuales, por parte de madre, eran de Ampuero (Cantabria). Y que cada perro se lama las llagas de su historia.