Pelotas de fútbol

Habíamos quedado en que el fútbol es lo más importante de las cosas menos importantes. Por eso ya sabemos todo sobre la próxima temporada balompédica y casi nada sobre el curso escolar que viene, si es que viene. Cuestión de prioridades. Por ser justo, matizo ... que sabemos lo que sabemos del fútbol, pero solo del profesional, del que mueve la pasta gansa. El de Messi, Ramos y, ahora, del Logroñés. Y luego están los de Segunda B y bajando. El infrafútbol, que le llamaba con tino mi admirado Sergio Moreno. Leo en Deportes que el infrafútbol es la última flecha que la queda a la Federación Española (RFEF) en el carcaj para sacarle un ojo a la poderosa Liga de Fútbol Profesional (LFP). La guerra entre ambas es como la nieve del Kilimanjaro, perpetua. Una guerra sin héroes. En las guerras entre villanos la cosa es hacer daño al otro. Como sea, con lo que sea y al precio que sea. El infrafútbol lleva años sobreviviendo a esas guerras. Pero algún día se le hincharán las pelotas. De fútbol.