Objetivo Logroño

Ahora entiende el lector nuestra actitud ante el ferrocarril y el tendido eléctrico.

Estamos padeciendo una crisis económica por la pandemia. Las bodegas se resienten y se anhela forzar las exportaciones de vino para atraer divisas. Pero este anhelo puede ser lograble exportando a Suiza, Alemania o EEUU. En cambio es dudoso entre otros países que regatean y su demanda puede no traducirse en dinero para la viña.

Por estas consideraciones volvemos la vista a Logroño, capital de la Comunidad, cuya industria no acaba de fortalecerse. A los hombres de la viña y del vino de Rioja nos interesa la industria de Logroño por ser un centro próximo de demanda que, con poder adquisitivo mayor, será bueno para el Rioja en volumen. Pero además las campañas de cata que hemos desarrollado en Logroño (Ateneo, 'El vino y los Cinco sentidos', etc.) nos ha permitido percibir un fino interés por las novedades del Rioja.

Por lo tanto, antes que soñar con las divisas de exportaciones, deseamos el fortalecimiento de Logroño como centro industrial pues repercutirá en beneficio de la calidad del vino de Rioja.

Recordamos una frase grabada en nuestra Escuela Técnica, en Madrid, 'sine agricultura nihil' Hoy, 70 años después, leemos... 'sine industria nihil'.