Inquietud desde Francia

Al minusvalorar la campaña electoral para volcarse en el conflicto en Ucrania, Emmanuel Macron arriesga cosechar hoy un pase apurado a la segunda vuelta de las presidenciales del día 24 sin poder ofrecer además resultado alguno en su mediación para torcer los propósitos del Kremlin. ... Antes de que Vladímir Putin desatara la guerra en su país vecino y la inestabilidad en todo el mundo, el presidente francés, confiado en su reelección, prefirió aprovechar la presidencia de turno de la Unión Europea para ejercer el liderazgo comunitario que deja vacante la desorientación de Alemania después de Merkel. Pero la enorme preocupación de los franceses por la nueva sacudida económica cuando enfilaban por fin la recuperación de la pandemia, con la energía y la inflación disparadas, obliga a Macron a dedicar las dos semanas que faltan hasta la definitiva votación a cerrar a la ultraderecha la puerta del Elíseo. Incluso aunque millones de electores opten por olvidar las satinadas imágenes dando la mano a Putin que Marine Le Pen tuvo que esconder precipitadamente, el momento, para Francia y para la UE, resulta demasiado comprometido para ceder al populismo y la insolidaridad.