Inoportunidad en la cárcel de Logroño

Instituciones Penitenciarias informó ayer del traslado de otros tres presos de ETA a Logroño en el marco de la política de acercamiento de reclusos de la organización terrorista a prisiones próximas al País Vasco que en los últimos dos años y medio ha abanderado el ... ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. A la ya notable nómina de terroristas encarcelados en La Rioja, que ronda la veintena, se sumarán ahora Ainhoa Múgica Goñi, Arkaitz Goikoetxea y Juan Antonio Olarra. La inclusión de los dos primeros en este traslado evidencia la enorme torpeza intelectual con la que se manejan los despachos desde donde se señalan los destinos para los terroristas reos. Porque Ainhoa Múgica cumple 18 años de condena por ordenar el atentado contra la Torre de Logroño el 10 de junio de 2001. Y Arkaitz Goikoetxea fue sentenciado a 133 por el ataque a la casa cuartel de Calahorra el 21 de marzo de 2008 y menudeó su vil actividad en otros lugares de la región. Ambas acciones en suelo riojano buscaron maximizar los daños, sin discriminar que estos pudieran ser personales o materiales. Sugerir siquiera que el penal de Logroño es la mejor opción para que cumplan su condena es la sublimación de la inoportunidad. Intolerable, además, cuando la idea parte de un Ministerio que debería mostrarse singularmente atento en esta cuestión que cabalga sobre el fino hilo de los sentimientos de los ciudadanos que sufrieron la ira terrorista. De todos los riojanos, en este caso.