A golpe de jazz

El autor de 'Vidas cruzadas' (1993) sentía el estímulo del jazz como el estilo de música con el que mejor sintonizaba. La visión de 'Bird' (1988), de Clint Eastwood, sobre el talentoso trompetista, Charlie Parker, le empujó a escribir, junto al guionista, Frank Barhydit Jr., un libreto sobre la capital del estado de Missouri que en sus años de apogeo tras la gran depresión fue una auténtica catapulta para formaciones y solistas de jazz.

El otrora jefe del cine independiente contó, en esta ocasión, con un holgado presupuesto que se deja notar en el cuidado diseño de producción. Un bastión meticuloso iluminado por una fotografía en tonos naranjas y marrones. El proyecto lo acometió Altman con una salud maltrecha y la ansiedad del rodaje le dejó muy tocado. Aún así logró apuntalar un producto muy sentido al que quiso impregnarle un sonido muy especial porque su idea artística estaba pensada en términos instrumentales afines al género y apostar por una imagen consecuente con la personalidad de los músicos.

Si bien el ambiente jazzístico sabía cómo interpretarlo visual y estéticamente, el relato le planteó algunas dudas y al final optó por narrar un argumento cuya acción acontece en 1934. Una rubia explosiva, Blondie O'Hara (Jennifer Jason Leigh) secuestra a la esposa de un consejero presidencial para que intermedie por su marido atrapado en las garras de un hampón local. A pesar de sus diferencias las dos mujeres establecen un vínculo muy especial mientras en la pantalla se descollan tramas y subtramas, en un tono noir, a la vez que mafiosos (Harry Belafonte) y corrupciones políticas se alternan con genios del jazz como Lester Young y otros fenómenos.