El proceso para recuperar «la unidad» tras la autodestrucción en la que se ha sumido el PP está permitiendo asistir en directo al progresivo arrinconamiento de su presidente, al que la pérdida de apoyos a borbotones ha llevado a una soledad tal que no parece ... quedarle otra salida que su inmediato abandono del cargo. A la abierta revuelta en su núcleo duro el lunes siguió ayer la dimisión de dos miembros de la ejecutiva, la rebelión de la inmensa mayoría de los barones territoriales y de buena parte del grupo parlamentario en el Congreso, incluida la portavoz del Congreso Cuca Gamarra cuyo asiento parlamentario se encontraba entre Casado y Egea. Desprovisto de la confianza hasta de los más fieles, Pablo Casado está en plena cuenta atrás después de verse forzado a aceptar la convocatoria de un congreso extraordinario en la junta directiva nacional del martes. La dimisión del achicharrado secretario general, Teodoro García Egea, su máximo respaldo hasta la fecha, evidencia la extrema precariedad del líder popular. El PP debería recobrar un clima sereno en unas horas críticas para su futuro, que exige la generosidad de todos, comenzando por el propio Casado.
¡Oferta 136 Aniversario!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.