¿Bravatas o profecías?

A primeros de 1938, Hitler anunció que se iba a llevar a cabo la Anchluss (anexión de Austria al III Reich). Desde ámbitos progresistas de toda Europa se levantó la voz de alarma, pero los gobiernos europeos decían que solo era una bravata, que no ... iba a pasar. Pues bien: la Anchluss se hizo efectiva el 12 de marzo de ese mismo año. Al poco, Hitler anunció que iba a anexionarse Los Sudetes, territorio de Checoslovaquia con población de habla alemana. Desde ámbitos progresistas de toda Europa se levantó la voz de alarma, pero los gobiernos europeos decían que solo era una bravata, que no iba a pasar, y que era más preocupante «el avance del Comunismo». Pues bien: el 10 de octubre de 1939 las tropas alemanas tomaron Los Sudetes. Al poco de iniciar el año 1939, Hitler anunció que iba a anexionarse Polonia. Desde ámbitos progresistas de toda Europa se levantó la voz de alarma, y esta vez los gobiernos europeos empezaron a preocuparse, aunque les preocupaba más «el avance del Comunismo» y prefirieron seguir creyendo que era una bravata. Pues bien: el 1 de septiembre de 1939, Alemania invadió Polonia. Y ya sabemos lo que vino después.