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Igual que la banda sonora de 'Tiburón' se construye sobre dos únicas notas, (Fa y Fa sostenido) la carrera hacia el poder de José Luis ... Ábalos también tiene sólo dos: mujeres y dinero. A esta partitura de simplicidad elemental le añadía de vez en cuando fanfarrias inexplicables, como tener pinchada ilegalmente la luz del chalé de Cádiz. Se han publicado extractos de sus conversaciones con Koldo y es como estar viendo una escena de Torrente y sus secuaces:
– «Oye, ¿el subnormal del jardinero no cortaría la luz? Verdad???», pregunta Koldo.
– «Tenía ese presentimiento desde que llegaba. Agua de momento hay. Luz enganchada. 200 euros», responde Ábalos.
– «Ok».
– «Antes de reanudar el servicio hay que desenganchar porque si no la multa puede ser de 6.000 euros», advertía finalmente el exministro de Transportes.
Es un acto de corrupción tan torpemente pueril que demuestra la sensación de impunidad con la que se maneja cierta clase muy particular de ladronzuelo español, el de coche oficial y despacho. Lo de Ábalos y Koldo revela el nivel grotesco de decadencia al que ha llegado el país, porque uno los ve manejarse con esa tranquilidad en chapuzas tan minuciosamente mediocres que es inevitable recordar la frase que escribe Galdós en 'Miau': «Bienaventurados los brutos, porque de ellos es el reino de la Administración».
Además de estos enchufes eléctricos otros iban directos al BOE: Jésica Rodríguez estuvo en Ineco y Tragsatec, Claudia Montes –modelo y Miss Asturias– en Logirail, una filial de Renfe en donde también cayó Andrea de la Torre (otra expareja de Ábalos) y en Emfesa (del Ministerio de Transportes) entró Nicole, amiga íntima de Koldo. La UCO sospecha de estas colocaciones igual que usted y que yo, y más cuando la propia Jésica ha admitido ante el Supremo que cobró de las dos empresas públicas sin trabajar.
Es lo que más me molesta a mí de toda la trama corrupta, porque para que haya estos enchufes debe darse un cierto clima moral, un aire tercermundista como en la historia de Bokassa, el dictador africano que tuvo 17 esposas y más de 50 hijos y fue un reputado experto en colocar a la familia en toda clase de cargos de la administración centroafricana.
Ahora que 'Cine de Barrio' va a contextualizar las películas de Alfredo Landa y Paco Martínez Soria ante «actitudes machistas y sexistas» sería recomendable que alguien nos explicara cómo ha pasado esto hoy: que el portero del puticlub Rosalex de Pamplona fuera asesor de un ministro, Vocal del Consejo de Puertos del Estado y Consejero de Renfe, que Ábalos siga cobrando su sueldo de diputado y que no dimita nadie ante este trajín de señoras por empresas públicas de España.
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