El domingo salió a la calle el último secuestrador de Ortega Lara que permanecía en prisión. Venga, vamos a quejarnos del confinamiento domiciliario. Luis Erostegui Bideguren fue condenado a 224 años por varios delitos -terrorista versátil, también tenía en su haber el asesinato de varios ... guardias civiles y el secuestro de Julio Iglesias Zamora-. Nunca ha pedido perdón. Leo en 'El Correo' que el etarra hacía vida normal en su pueblo, mientras Ortega Lara estaba en el zulo de una nave industrial. Leo también que en julio salió Xabier Ugarte, otro secuestrador de Ortega Lara, tras 22 años en la cárcel. Fue recibido con bengalas y cientos de personas en Oñati. Atravesó un pasillo humano con sus familiares y el homenaje continuó en la 'herriko' taberna. Una fiesta popular por todo lo bajo.

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Erostegui Bideguren sale ocho meses después que Ugarte, pero con un escenario diferente. No porque se haya acabado la humillación de las víctimas y el enaltecimiento del terrorismo sino por fuerza mayor, por pandemia, por coronavirus. Claro que estará mejor en su casa que en la cárcel y que no ha cumplido los 224 años, pero al menos no habrá homenaje.

Es un poco Joan Crawford en 'Galería nocturna'. En el episodio 'Ojos' (escrito por Rod Serling y dirigido por Steven Spielberg), la actriz interpreta a Claudia Menlo, millonaria ciega y malísima de Nueva York que quiere ver. Un pobre que necesita dinero accede a donarle sus ojos por 9.000 dólares. Menlo chantajea a su médico para que le haga esa operación ilegal. Pero la visión durará sólo unas once horas. Tras la cirugía, se quita las vendas y ve por un momento hasta que todo se vuelve oscuro otra vez. Hay un apagón en Nueva York. Algo es algo contra los malos.

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