Acostumbrarnos

Sí, La Rioja necesita un gobierno de coalición. Igual que España. Y sí, ese gobierno de coalición es lo que es un gobierno de coalición: con consejeros (o ministros) de más de un partido. Porque lo demás (que haya directores generales, subalternos o bedeles de otras formaciones) no lo convierten en un gobierno entre dos, sino en un gobierno de uno con otro pegado.

Otra cosa es la representatividad, la cuota, el número de sillones y qué cuelgue de cada uno de ellos. Que debe ser razonable, porque pedir la Luna es lo mismo que no negociar.

Para que todo esto funcione, sin embargo, nos falta un paso: acostumbrarnos. Ser un poco como Navarra o el País Vasco, donde llevan lustros sin una mala mayoría absoluta, y en las condiciones más espantosamente difíciles, y han conseguido sacar adelante sus territorios. Aprendamos.