Vox se abre a apoyar a Feijóo sin entrar en el Gobierno para evitar pactos con los independentistas

El manifiesto de Vox de este fin de semana fue bienvenido en el Partido Popular. Alberto Núñez-Feijóo se apresuró a felicitarse por la oferta de Abascal, que consideró un «avance» , al tiempo que abogó por un «Gobierno en solitario del Partido Popular basado en un acuerdo amplio». El ofrecimiento del partido ultraconservador marcó la intervención este domingo de Feijóo en la Fiesta del Albariño de Cambados, donde el líder de los populares aprovechó para recoger el guante lanzado por Abascal para prometer que trabajará por un un pacto constitucional que evite «la situación de ingobernabilidad», el bloqueo y la repetición electoral tras los comicios generales del 23-J.

«Necesitamos un gobierno en solitario del Partido Popular. Es necesario un partido para un gobierno y no 24 partidos gobernando en España. Tantos partidos para gobernar, con ideologías distintas e intereses políticos contradictorios, es lo contrario de la gobernabilidad de nuestro país», afirmó el presidente del PP.

El respaldo 'gratis' de Vox a Feijóo allana el camino a que éste, tal y como planea, pueda someterse a una sesión de investidura tras la propuesta del Rey, ya que Abascal previsiblemente le anunciará al jefe del Estado su apoyo al PP en la ronda de reuniones con los líderes políticos, a la que, sin embargo, muy probablemente no acudan varios de los partidos nacionalistas e independentistas, con lo que Felipe VI no sabrá con cuántos posibles apoyos cuente llegado el caso Sánchez.

La propuesta de apoyar sin condiciones a Feijóo se produce después de que se haya conocido que los líderes de los dos partidos de derecha se reunieron durante la semana posterior a las elecciones a pesar de los duros reproches que ambos se lanzaron durante la campaña.

Aunque la oferta evidente de Vox es facilitar 'gratis' un Gobierno de Alberto Núñez Feijóo sin entrar en el Ejecutivo como reclamó durante la campaña electoral, lo cierto es que en los términos en que está redactado el manifiesto hecho público este domingo, la declaración, en principio, dejaría margen, incluso, a que la formación pudiera abrirse a apoyar a que Sánchez siguiera en Moncloa, siempre y cuando éste aceptara las exigencias de abandonar a los independentistas, algo que, a día de hoy, parece imposible.

En cualquier caso, el partido de Abascal no aclaró en su manifiesto si llegaría tan lejos como votar a favor de la continuidad de Sánchez en esa hipótesis de política-ficción más que improbable de ruptura con sus socios preferentes. Un escenario que además, sin duda, supondría una fractura irreparable con Sumar.

Hasta este domingo, la última posición de Vox ante la investidura había sido la de prometer apoyar a Feijóo en el caso de que esa proclamación fuera viable con el apoyo de un grupo «cinco o seis diputados socialistas» tránsfugas, tal y como propusieron el pasado 26 de julio tanto Santiago Abascal como Iván Espinosa de los Monteros .

«Vox no será la excusa de nadie ni el impedimento para evitar un gobierno de quienes pretenden destruir los fundamentos de la Constitución», explicó este domingo el partido de Santiago Abascal, que insistió en esta oferta es «prudente y sensata», a pesar de «quienes se empeñan en demonizar y culpar Vox, demonizando y culpando a más de tres millones de españoles que tienen derecho a la representación política».

Vox justificó esta oferta de apoyos con la única contraprestación del cordón sanitario a independentistas y nacionalistas ante «la posibilidad de que Pedro Sánchez, sea investido presidente con los apoyos del prófugo de la Justicia, Carles Puigdemont, Bildu, PNV y ERC, cuya secretaria general fugada en Suiza, Marta Rovira, es la encargada de negociar con el PSOE dicho acuerdo».

Según el partido de Abascal, un Ejecutivo nacido del acuerdo con los secesionistas y nacionalistas constituiría «una grave amenaza al orden constitucional y a la convivencia» con la posibilidad de que Sánchez incluso «concediera un referéndum de autodeterminación» , lo que –afirma Vox- supondría «un golpe de estado promovido por el propio Gobierno que probablemente conllevaría una ruptura de la convivencia y la paz social».

Vox recordó en su comunicado que ya en la pasada legislatura Sánchez indultó a los líderes del procés, condenados y reformó el Código Penal para eliminar la sedición y rebajar el de malversación como «peaje a ERC». Y ahora, explica el partido ultraconservador, Sánchez «necesita el apoyo activo de Junts y Bildu», que «constituyen una grave amenaza a los fundamentos del orden constitucional».

«Ante la gravedad de los hechos y el peligro de que Pedro Sánchez sea investido presidente de la mano de todos los enemigos de España», Vox reiteró la reciente declaración de Abascal, asegurando que «no seremos un obstáculo para evitar un Gobierno de destrucción nacional».