Villarejo: «Voy a desenmascarar a todos»

El antiguo policía de 69 años, que durante años grabó de forma subrepticia sus conversaciones con dirigentes políticos, empresarios o integrantes del mundo judicial, ha sido claro al salir de la Audiencia Nacional. «Voy a desenmascarar a todos», ha advertido. Y para hacerlo ha señalado que está dispuesto a colaborar con la justicia: «Hoy comienza el kilómetro cero. Voy a pedir copia de todo lo que me incautaron, porque sorprendentemente solo ha salido el 10%», ha dicho.

Con su clásica boina negra, la mascarilla del mismo color con la bandera de España y un parche en el ojo izquierdo por un «puto ictus», el acusado ha justificado ante los medios de comunicación sus actividades privadas. «Nunca fui un policía normal, no tuve despacho, y casi todo mi trabajo privado estaba condicionado por el interés público. Como no había fondos reservados, como se hace en muchos países, se cobraba a la empresa a la que se ayuda, que eran casi todas de interés estratégico para España», ha relatado.

Félix Sanz Roldán, ex director del CNI, ha sido otro de los hombres señalados por el comisario jubilado cordobés. Su rivalidad personal ha acabado en los juzgados y éste le atribuye su detención y los tres años y cuatro meses de estancia en prisión preventiva. «El gran lord protector de la Corona no ha sido muy habilidoso a la hora de proteger al señor (don Juan Carlos). Mi problema surge cuando comencé a cuestionar sus trabajos (se refiere al rescate de un periodista cuya negociación perdió por el camino tres millones de euros). Y yo ahora le digo a él que ningún secreto aguanta el tiempo», ha afirmado.

Villarejo abandonó ayer la cárcel tras permanecer recluido desde noviembre de 2017. Sus servicios parapoliciales desde hace décadas han puesto en jaque con sus grabaciones a políticos e influyentes empresarios del país, sin olvidar los negocios del rey emérito a través de las revelaciones de Corinna Larsen. En suma, su intención, según ha reiterado hoy, es defender sus lucrativas actividades caiga quien caiga.

La excarcelación del acusado se consumó este miércoles después de que el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, instructor del 'caso Tándem', acordase su libertad bajo estrictas medidas cautelares para impedir su fuga. El magistrado tomó esta decisión una vez que la Fiscalía Anticorrupción cambió el paso y accedió a que éste saliera ante la imposibilidad de juzgarle antes de noviembre. La razón es que ese mes hubiera cumplido el límite legal de la prisión preventiva (cuatro años) para cualquier acusado sin sentencia condenatoria.