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Adolfo Lorente
Jueves, 18 de julio 2024, 22:05
Isabel García llegó a la dirección del Instituto de la Mujer a finales del pasado año a pesar de la férrea oposición de la parte minoritaria del Gobierno de coalición, por sus discursos «abiertamente transfóbicos», llegando a equiparar sus ideas con las de la presidenta ... de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Las críticas iniciales dieron paso a las malas caras y a la resignación, pero ahora, en puertas del primer aniversario de las elecciones generales del 23-J que dieron el triunfo al PP pero que permitieron a Pedro Sánchez seguir en Moncloa, el asunto ha derivado en otra grave crisis en el seno del Ejecutivo después de conocerse que la empresa que comparte con su mujer ha sido beneficiada con la contratación de 64 puntos violeta por los que habría facturado 250.000 euros a ayuntamientos liderados por el PSOE.
«La directora del Instituto de las Mujeres nunca debió ser nombrada. La transfobia es injustificable; usar una institución trascendental en la lucha contra las discriminaciones para el enriquecimiento personal, también. Debe ser cesada de inmediato», aseguró ayer Sumar en un contundente mensaje publicado en sus redes oficiales.
Que lo exija un partido de la oposición entra dentro de la lógica política, pero que lo haga uno de los dos partidos que sustentan un gobierno y lo haga con luz y taquígrafos no deja de ser chocante. Esta reacción evidencia que esta crisis no va a ser una tormenta de verano en un momento, además, necesita marcar perfil en un momento muy bajo tanto en lo electoral como en lo gubernamental, con la vicepresidenta Yolanda Díaz intentando buscar el foco que le está quitando Pedro Sánchez.
El portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, advirtió ayer de que van a ser «francamente duros». «Hace mucho tiempo que tenemos muchísimas diferencias con aquel nombramiento, que manifestamos ser extraordinariamente críticos con ese nombramiento, y además hemos pedido su comparecencia ante la Comisión de Igualdad», desveló en declaraciones a los medios.
Según publicó este miércoles 'El Español', la directora del Instituto de las Mujeres habría recibido al menos 64 contratos públicos de Ayuntamientos gobernados por el PSOE, con los que habría facturado alrededor de 250.000 euros con las empresas que comparte con su mujer, Elisabeth García. En todo caso, la directora del Instituto de las Mujeres ha asegurado este jueves que tiene «la conciencia tranquila, la certeza de haber hecho las cosas bien» y que ha cumplido «escrupulosamente la ley», según indicó en un comunicado publicado en sus redes.
Por su parte, la ministra de Igualdad, Ana Redondo, pidió algo de «tiempo». «Hay que permitirle que dé las explicaciones que considere y eso es lo que vamos a hacer, que se explique y que ofrezca todo tipo de información que aclare esta cuestión», aseguró al ser preguntada sobre la continuidad de Isabel García en su cargo. «Yo le exigí, le pedí y hablé con ella para que diera todas las explicaciones, que hubiera transparencia sobre toda esa información y, por supuesto, luz y taquígrafos ante todo lo que se ha publicado», explicó.
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