Sociedad Civil Catalana apela a los socialistas críticos con la amnistía a votar en contra de la ley

«La lealtad de un representante del pueblo español es, ante todo, con la Constitución, con la Ley y con España», ha asegurado esta plataforma en un comunicado, con el que ha querido presionar a los diputados socialistas de cara a la votación del jueves, que aprobará definitivamente la norma, tras el pacto entre PSOE, Junts y ERC de la semana pasada en la comisión de Justicia. «Instamos a los diputados socialistas a aferrarse a sus valores socialdemócratas y a tomar conciencia de la responsabilidad histórica de su voto y del daño que infringirán al Estado democrático de derecho si avalan conceder impunidad total a quienes quisieron y quieren destruir nuestra democracia», ha señalado esta entidad.

Salvo el presidente de la Junta de Castilla La Mancha, Emiliano García Page, ningún dirigente socialista con cargo institucional de relevancia ha salido públicamente a criticar la ley de amnistía. Page ha considerado este lunes en El Mundo que «esta amnistía pone de rodillas a la Constitución». SCC se ha dirigido a los miembros del PSOE que pudieran opinar como Page (si los hubiere) y que votarán el jueves la norma pactada entre los socialistas, ERC y Junts. «Hacemos un especial llamamiento a los socialistas críticos con el sometimiento del Gobierno al chantaje del nacionalismo supremacista», según la entidad de la sociedad civil antisoberanista. «Su conciencia y su obligación como demócratas están por encima de la obediencia ciega a las razones de carácter partidista», ha recordado SCC.

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«Ninguna disciplina de partido puede exigir a un cargo electo que renuncie a defender el bien común y el principio de igualdad entre todos los españoles», según la entidad constitucionalista. «Votar a favor de una ley de amnistía contraria a la Constitución y al Derecho europeo, escrita al dictado de prófugos y condenados por el Tribunal Supremo y negociada a espaldas de los españoles implica sucumbir a intereses espurios a cambio de mantener el poder», ha rematado. A su juicio, la mayoría de la población está en contra de la ley, pues no creen que sirva para la reconciliación, sino más bien consideran que hará de acicate a los nacionalistas para «avanzar hacia la autodeterminación».