Sánchez mantiene la cita con Torra si continúa como presidente

Los socialistas no comparten la tesis de PP y Ciudadanos de que Torra, al perder la condición de diputado, deja de ser presidente, y se remiten al articulado del Estatut. Al presidente de la Generalitat «lo elige el Parlament», y Torra, por consiguiente, «lo seguirá siendo en función de lo que decida» la Cámara catalana, sentenció Narbona.

Lo que ya no está tan claro es que el encuentro para reanudar el diálogo sobre el conflicto en Cataluña se vaya a producir en la primera semana de febrero, como estaba previsto. Los gabinetes de Sánchez y Torra han estado en permanente comunicación en estas últimas semanas para cuadrar las agendas de ambos a fin de que se reunieran la próxima semana. Las dificultades pueden surgir no tanto porque el Parlamento catalán vaya a destituir a Torra, supuesto muy improbable porque Esquerra no se plantea dar ese paso, sino por el deterioro de la situación política catalana y el probable adelanto electoral.

El enfrentamiento entre los dos socios en el Gobierno catalán crece cada día, y en ese clima Torra tendría difícil justificar una reunión con Sánchez, máxime después de haber sido despojado de su escaño por decisión de la Junta Electoral Central.

El PP no quiere ni oír hablar de esa reunión. Los populares no desligan la condición de diputado de la de presidente de la Generalitat. Ni tan siquiera reconoce las dudas jurídicas que suscita esta circunstancia. Interpretan, como Ciudadanos, que, despojado de su credencial en la Cámara catalana, Torra no puede seguir tampoco al frente del Gobierno autonómico y advierten sobre nuevas acciones legales en caso de que el Parlamento de Cataluña no le «sustituya», además, como jefe del Ejecutivo.

No todos en el PP tienen tan clara esta interpretación, porque aunque el Estatuto de Autonomía de Cataluña obliga a que el presidente de la Generalitat sea elegido entre los miembros de la Cámara, no aclara qué ocurre si, más tarde, el investido pierde el acta de diputado. Lo que sí comparten en la formación conservadora es que Torra «debería» dimitir tras ser inhabilitado como parlamentario.

En este contexto, la dirección del PP exige que Sánchez cancele su cita con el presidente catalán. «¿Qué más tiene que pasar para que suspenda la reunión prevista con el inhabilitado Torra?», preguntó ayer el líder de los populares, Pablo Casado, en Twitter. Poco después, su número dos, Teodoro García Egea, advirtió de que en caso de que el encuentro se mantenga, el jefe del Ejecutivo entrará en una «deriva peligrosa» y el PP estará «vigilante para evaluar las posibles consecuencias». No concretó, sin embargo, cuáles serían.

La semana pasada Casado ya avisó de que procederá en los tribunales contra el Gobierno «si no hace nada para cesar en sus funciones» a Torra. De momento, la cúpula del PP se muestra muy satisfecha por que sus recursos ante la Junta Electoral Central hayan derivado en la retirada del escaño del presidente de la Generalitat.