Reynders asegura que el desbloqueo del CGPJ está «muy cerca»

Reynders tenía previsto viajar a Madrid el pasado 27 de marzo para encontrarse con el ministro de Justicia, Félix Bolaños, y el vicesecretario de Acción Institucional del PP, Esteban González Pons, pero la reunión fue cancelada en el último momento a petición del PP. «Cuando llegue la señal política retomaremos la discusión a tres. Pero es necesario también que las dos partes se hablen, espero que sea eso lo que esté ocurriendo en Madrid», explicó ayer Reynders, tras apuntar que se mantiene abierto al diálogo.

El último encuentro para tratar de alcanzar un acuerdo en torno al CGPJ –pendiente de renovación desde 2018– tuvo lugar a mediados de marzo en Estrasburgo. Tras aquella reunión, el comisario Reynders se mostró optimista: aseguró que había habido «avances» y que apreciaba una «voluntad política» del PP y el PSOE para lograr un pacto. Entonces el PP también desmintió a Reynders y González Pons afirmó que las posiciones seguían «bloqueadas». Desde entonces no ha habido más contactos y Bruselas se mantiene a la espera de que las partes «pidan una nueva reunión».

El principal escollo se encuentra en la reforma del método de elección de los vocales, que el PP exige que se lleve a cabo en paralelo a la renovación del CGPJ. El PSOE, en cambio, aboga por renovar este organismo primero y acometer «más adelante» la modificación del proceso de nombramiento para ajustarlo a los estándares europeos.

En ese sentido, Reynders recordó que el Ejecutivo comunitario cree que es «prioritario» renovar el CGPJ y proceder «inmediatamente después» al sistema de elección de los vocales. El comisario se mostró abierto a propuestas «concretas» y confía en que PP y PSOE logren «un acuerdo político» en torno a esta cuestión.

A falta de veinte días para que abandone su puesto y concurra a la presidencia del Consejo de Europa, Bruselas no ve la marcha de Reynders como un 'ultimatum' a estas negociaciones. El liberal belga ya abrió la puerta a que otro comisario podría tomar el relevo en la mesa de diálogo en caso de que no se alcance un acuerdo a tiempo