El reparto de los fondos Covid desata una revuelta autonómica contra Sánchez

La mayor parte de las autonomías, en cambio, se queja tanto de los criterios establecidos como por las cantidades. Según publicó el Boletín Oficial del Estado (BOE), en esta primera distribución de fondos se tendría en cuenta el impacto del coronavirus en cuatro puntos: los ingresos en UCI suponían un 30%; los pacientes hospitalizados, un 25%; las PCR realizadas un 10% y la población protegida equivalía un 35%. Estas variables sanitarias se han utilizado con los datos a 31 de abril. Los parámetros han favorecido a las dos comunidades más azotadas por la Covid-19 tanto en mortalidad como en la tensión que sufrieron sus sistemas sanitarios.

En este primer reparto, el segundo de 3.000 millones se hará en noviembre, se ha tenido en cuenta la renta per cápita de la población y no la absoluta, lo que soliviantó a la Junta de Andalucía. La comunidad más poblada de España recibirá casi 598 millones. «Somos solidarios, pero este reparto nos parece desproporcionado», clamó el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, en las redes. Según sus cuentas, Andalucía recibe 70 euros por habitante frente a los 221 de Madrid o los 122 euros de media nacional. La rebaja del porcentaje de la población protegida es lo que ha enfadado a los gallegos.

La Xunta, que aplaude la creación de este fondo, acusó al Gobierno de rebajar este parámetro y perjudicar a las comunidades más envejecidas como Galicia, Asturias o Castilla y León. Mientras el Principado está contento con sus 106 millones, al igual que Extremadura (96 millones) y País Vasco (328 millones), la Junta castellano-leonesa mostró su rechazo de forma práctica: va a recibir 349 millones, 110 millones menos de los que preveía.

En las críticas de los Gobiernos autonómicos al Ejecutivo central coinciden partidos de todos los colores, aliados y enemigos de la coalición PSOE-Podemos. «Paupérrima e injusta», calificó el reparto el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que gobierna en coalición con los socialistas. «La Rioja, que tiene la mitad de población, recibe lo mismo. Navarra, con la misma población, recibe el doble», explicó con claridad sobre los 64 millones destinados a su comunidad. «Deja mucho que desear», coincidió su homólogo manchego, Emiliano García-Page. Postura similar a la de otros Ejecutivos socialistas como el aragonés o el balear.

Pero este reparto es solo el primer paso. La siguiente «batalla», como la denominó Revilla, se producirá en la conferencia de presidentes autonómicos que ha convocado Pedro Sánchez. Encima de la mesa, la distribución de la parte autonómica de los 140.000 millones comprometidos por Europa. Las comunidades más críticas esperan un trato «más justo» de la Moncloa. Por si acaso, la Generalitat catalana ya ha hecho público lo que «necesita»: 30.000 millones.