Puigdemont y la ANC presionan a ERC con la vía unilateral

En vísperas del día de Sant Jordi el Consejo para la República ha decidido publicar la declaración de independencia que aprobó el Parlamento catalán el 27 de octubre de 2017. Puigdemont reivindica la DUI y lo hace en varios idiomas, con el objetivo, según ha detallado la entidad, que la declaración de independencia se convierta en una «herramienta diplomática» para que el secesionismo pueda explicarse en el mundo. Se trata de la primera publicación que edita la entidad con sede en Waterloo y recuerda el texto que aprobó la Cámara catalana el 27-O y que hacía referencia al que Junts pel Sí y la CUP habían aprobado el 10-O. «Constituimos la República Catalana, como Estado independiente y soberano, de derecho, democrático y social», afirma. «Asumimos el mandato del pueblo de Cataluña expresado en el referéndum de autodeterminación del 1 de octubre y declaramos que Catalunya se convierte en un estado independiente en forma de República», proclama el texto.

Junts ha apuntado estos días atrás que las negociaciones entre ERC y Junts encallan en la hoja de ruta secesionista. ERC apuesta por la mesa de diálogo con el Gobierno para buscar una solución a la cuestión catalana. Está dispuesto a darle dos años. Si la mesa fracasa, ERC y la CUP abogan por un nuevo embate contra el Estado, que podría ser un nuevo referéndum unilateral. Junts no acaba de aclarar qué propone, pero sí insiste en que por primera vez el independentismo superó el 52% de los votos el 14-F.

Mientras, la Asamblea Nacional Catalana, distanciada de los partidos secesionistas, a los que acusa de alejarse de la independencia, insiste en la vía eslovena para lograr la independencia. La ANC aboga por un proceso de independencia «unilateral» y tanto el caso esloveno como los de los países bálticos los analizará en unas jornadas en Barcelona los próximos 7 y 8 de mayo. La entidad soberanista organiza la conferencia «Precedentes unilaterales«, para poner sobre la mesa la «importancia de los procesos de independencia unilateral y aprender de las experiencias» de los países bálticos y de Eslovenia.

El expresidente de la Generalitat, Quim Torra, ya apostó por la vía eslovena, durante un viaje al país balcánico, en 2018, durante su mandato. Tras reunirse con dirigentes eslovenos, Torra afirmó: «En Eslovenia nos dijeron que ellos lo hicieron y que nosotros también lo podemos hacer. La vía eslovena es la vía de la libertad. Los catalanes hemos perdido el miedo. No hay marcha atrás en el camino hacia la libertad. Los eslovenos decidieron tirar adelante con todas las consecuencias. Hagamos como ellos y estemos dispuestos a todo por vivir libres». La independencia de Eslovenia se consumó tras una guerra de nueve días en la que hubo una sesentena de muertos. Tras un referéndum unilateral, seis meses después, el Parlamento esloveno declaró la secesión. Dos días después, tropas del ejército yugoslavo invadieron la autoproclamada República de Eslovenia y estalló u enfrentamiento armado que duró nueve días.