El PSOE cede ante una propuesta del PP crítica con la política exterior de Sánchez para evitar otra derrota

En concreto, la proposición de ley de los populares –cuya tramitación puede ser ahora dilatada 'sine die' con ampliaciones de los plazos de enmienda– aboga por obligar al Ejecutivo a informar con carácter previo de sus intervenciones en el Consejo Europeo y de la toma de decisiones que no hayan sido previamente contempladas en la Estrategia de Acción Exterior, en la que están recogidas las prioridades y objetivos del Gobierno en la materia para periodos de cuatro años. A favor de su tramitación, cosechó 292 votos frente a 24 en contra y 14 abstenciones.

Los aliados del Ejecutivo, molestos, por ejemplo, con el giro estratégico imprimido a la posición tradicional de España sobre el Sáhara Occidental, no dudaron en tildar a los populares de «hipócritas», en recordarles que José María Aznar metió a España en la guerra de Irak sin consenso, en subrayar que fueron ellos quienes impulsaron esta norma en 2014 y jamás se plantearon modificarla cuando tuvieron mayoría absoluta para hacerlo. Pero Esquerra, Junts, Bildu, PNV, Podemos y BNG también se mostraron partidarios de discutir la propuesta y aumentar los mecanismos de control al Gobierno. «La verdad es la verdad la diga Agamenon o su porquero», llegó a decir el portavoz de ERC Marc Alvaro.

Sumar, eneste caso, se alineó con el PSOE en el argumento de que lo que pretende el PP es enviar a Bruselas al presidente del Gobierno «atado de pies y manos para que sea víctima de las mayorías conservadoras y reaccionarias de la UE». Pero la intervención de su portavoz, el diplomático Agustín Santos, dejó traslucir también, en parte, el malestar con que ayer volvió a escenificar la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, con los socialistas y defendió que el Gobierno se siente con sus socios para «consensuar una política exterior progresista y feminista».

La líder del grupo minoritario de la coalición había reivindicado horas antes como histórico el reconocimiento del Estado palestino, pero, al igual que otras fuerzas de izquierda, como Podemos, defendió que hay que ir más allá y actuar diplomáticamente contra Israel llamando a consultas a la embajadora en Tel Aviv, Ana María Salomón, imponiendo un embargo de armas y uniéndose a la demanda de Sudáfrica ante la Corte Penal Internacional por genocidio en Gaza.

Su mayor reproche a Pedro Sánchez, no obstante, tiene más que ver con el acuerdo de apoyo armamentístico a Ucrania. «La falta de transparencia del Gobierno de España con su socio es muy grave. En dos ocasiones pedimos, y la mantuvimos en el Consejo de Ministros, información por escrito de esas cuantías elevadísimas para saber de qué demonios estábamos hablando», afirmó. Los socialistas replican que han sido perfectamente «transparentes» tanto en las reuniones internas como con el Congreso y achacan la actitud de Sumar al contexto electoral de las europeas del próximo 9 de junio.

A ese contexto apeló también, precisamente el PP, para echar en cara a Sánchez el, a su juicio, «inoportuno» momento elegido para materializar el reconocimiento de Palestina. El principal partido de la oposición insiste en su respaldo a la solución de dos Estados pero sostiene que la medida adoptada ayer por España junto a Irlanda y Noruega no ayuda ahora ni a solucionar el conflicto ni al pueblo palestino y que España debería haber esperado a ir de la mano de más socios europeos. Su portavoz, Miguel Tellado argumentó que el presidente sólo ha pretendido crear una «cortina de humo» para tapar las «miserias» de su Gobierno.

Vox , que calificó de «claramente insuficiente» y de «señorita Pepis» la reforma de la ley de acción exterior propuesta por el PP también fue el único partido abiertamente contrario al reconocimiento del Estado de Palestina. Su candidato a las europeas, Jorge Buxadé, afirmó incluso que a quien se reconoce es a una organización terrorista, Hamás.