La Policía apunta a que «otros cargos políticos han ayudado y servido» a la trama de 'Tito Berni'

En uno de los últimos informes que ha remitido a la juez María de los Ángeles Lorenzo, la Brigada Provincial de Policía Judicial de Santa Cruz de Tenerife avisa a la instructora de que debe seguir manteniendo buena parte del caso bajo secreto sumarial ya que no solo «se han detectado más empresarios y ganaderos que han pagado a la organización» corrupta, sino que también existen «serios indicios de que otros cargos políticos estarían ayudando y, a su vez, sirviéndose de la organización» que lideraba el ya exparlamentario del PSOE.

En ese mismo documento -el atestado 1799/22 del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Comisaría Provincial de Santa Cruz, al que ha tenido acceso este periódico-, los agentes aseguran que los nombres de estos políticos y empresarios «ya se divisan» en varias de las «conversaciones» analizadas, pero que que «hasta el momento» no se ha podido «ahondar en su papel en la trama investigada, debido al alto volumen de material pendiente de análisis».

Y es que la envergadura del material supuestamente incriminatorio para cargos del PSOE y empresarios entregado a la justicia y a la policía por el mediador de la trama, el empresario Marcos Antonio Navarro Tacoronte, es mastodóntico. Según los atestados, en el primero de los dos móviles que facilitó a los agentes, un Iphone 11 Pro Max, el conseguidor entregó a los investigadores un total de 63 gigabytes de datos con 4.559 contactos, 1.651 documentos, 57.163 imágenes, 25.855 archivos de audio (parte de ellos grabaciones de varias horas de duración) y 1.717 vídeos. En el segundo terminal que Navarro puso a disposición de la Policía, otro lphone modelo 7 Plus, hay 65 gygabytes de datos, entre ellos 2.430 contactos, 645 documentos, 49.863 imágenes, 13.843 archivos de audio y 1.441 vídeos.

Los investigadores de Delitos Tecnológicos creen que todavía demorarán meses en poder expurgar el total de los 152.178 archivos que contenían los dos teléfonos que están sirviendo como base para este sumario que salpica al PSOE en un año plagado de citas electorales.

Según han revelado fuentes de la investigación, buena parte de la ingente cantidad de documentos que había en los dos móviles entregados por el mediador no proviene de grabaciones hechas por el propio Navarro, sino de archivos que les fueron remitidos por terceros o que la mano derecha de 'Tito Berni' guardó en sus móviles (a modo de memoria portátil) procedentes de otros dispositivos.

De hecho, los agentes del caso han revelado que Navarro Tacoronte llegó a comprar por 1.000 euros los móviles a algunas de las prostitutas que participaron en las fiestas y que habían fotografiado o grabado a los parlamentarios o empresarios relacionados con la trama. Llegó a pagar incluso 300 euros a una de estas mujeres para que le pasara una fotografía de una de las personas que tomó parte en una de las orgías.

Otros muchos de los archivos sí que son manufactura propia de Navarro, particularmente los casi 50.000 audios aportados a la causa. El mediador, a través de varias aplicaciones de sus móviles y otros dispositivos, grababa siempre sus conversaciones telefónicas y presenciales.

Entre los encuentros que Navarro Tacoronte grabó está la famosa cena en el restaurante Ramsés de Madrid en octubre de 2020, en la que supuestamente participaron una quincena de cargos socialistas. Según el propio mediador, que se jactaba en las grabaciones de «asesorar» a dos ministros y tres senadores y de su amistad con el presidente canario, 15 o 16 parlamentarios del PSOE habrían participado en esos encuentros promovidos por 'Tito Berni'.

En la parte secreta de la causa también hay vídeos, fotografías y audios entregados por Navarro sobre reuniones, cenas, comidas y fiestas con políticos y empresarios. La relación precisa de estos con la trama es la que se sigue investigando, mientras se continúan analizando otros miles de documentos que se clonaron cuando en febrero del pasado año Navarro entregó sus móviles para exculparse de una falsa acusación de estafa de un empresario que no sabía cómo explicar a su mujer las salidas de dinero de su cuenta.