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Podemos mantiene su pulso con el Gobierno si este no acepta mantener el impuesto a las energéticas -el mismo tributo que el Ejecutivo pactó, a su vez, suprimir con Junts- y asegura que no se sentará en ninguna mesa de negociación si no cumple con ... este acuerdo pero no aclara qué posición adoptará en una eventual cuestión de confianza como la que Carles Puigdemont exigió la semana pasada a Pedro Sánchez.
«Es posible que tanto Junts como nosotros nos sintamos engañados y defraudados por los incumplimientos de este Gobierno pero las razones son muy diferentes» ha señalado este lunes el portavoz Pablo Fernández, a preguntas de los periodistas, sobre este procedimiento. A ojos de los morados, «esta normal que exista esa desconfianza, la dinámica de este Gobierno ha sido comprometerse con cada partido en cuestiones que después no tienen la voluntad de cumplir». Y vuelve a recordar a Moncloa que o cumple con el acuerdo alcanzado para la reforma fiscal o «que no nos esperen en ninguna mesa de negociación y ni cuenten con los votos de Podemos va sacar a adelante esos Presupuestos Generales del Estado. «Lo que el Gobierno debería tener claro es que los votos de Junts son tan necesarios para aprobar los Presupuestos como son los votos de Podemos», ha recalcado.
Visiblemente molesto, Fernández ha recalcado que el Gobierno debería negociar primero con la izquierda, planteando «propuestas ambiciosas y transformadoras». «Pero lo están haciendo al contrario; Podemos quiere impuesto a las energéticas y Junts, además de ejercer como el PNV de cachorritos de Repsol, quiere más competencias para echar a gente», en referencia a las negociaciones entre el Ejecutivo y los postconvergentes sobre las competencias en inmigración.
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