Vox llena Colón e ironiza con que Sánchez pedirá «habitación en Waterloo»

La formación de Santiago Abascal, que explícitamente no pretendía hacer un acto de partido, pasó con nota el examen a su capacidad de movilización al reunir una cifra de asistentes que, de atender al recuento oficial, sería cinco veces superior a la que Alberto Núñez Feijóo congregó ayer en Málaga y duplicar la de las concentraciones del PP y de Sociedad Civil Catalana celebradas hace unas semanas en Madrid y Barcelona.

«Hemos venido por duplicado, pero la copia es él», bromearon los hermanos gemelos Jorge y Alberto Fajardo, madrileños que no se pierden un mitin de Vox y que ya estaban en primera fila del escenario más de una hora antes de que empezara el evento.

«Compatriotas, los partidos son secundarios cuando la patria está en peligro. Y hoy España, su unidad, sus leyes, libertades e igualdad están amenazados por el secretario general del Partido Socialista y respaldado por el aplauso unánime y bovino de su comité federal», abrió fuego retórico Abascal.

El líder de Vox, que acusó a Sánchez de «perpetrar un golpe» con la amnistía, tildó de «vergüenza» y «traición» su hoja de ruta e ironizó con que tendrá que pedir «una habitación» a Puigdemont en «Waterloo» si se pliega a las condiciones del soberanismo catalán. «No van a pasar por encima de nosotros», zanjó.

Quien no quiso valorar la ausencia del PP -aunque se acercó a Colón, por ejemplo, Esperanza Aguirre- pero sí cargó veladamente contra la ausencia del líder popular fue Juan Carlos Girauta, exdirigente de Ciudadanos y hoy cabeza visible de la asociación Pie en Pared. «Hay algunos que tienen miedo a Colón», señaló, al tiempo que aludió al «símbolo de la unidad constitucionalista» que representa, a su juicio, la plaza. «Si el Estado no protege nuestras libertades las protegeremos nosotros, la Nación», bramó. El acto concitó a más de 60 agrupaciones.