El novio de Ayuso cambia de aspecto para su declaración judicial, aplazada a junio

Acompañado de tres abogados, González Amador ha entrado en los juzgados a primera hora con la intención de pasar desapercibido ante los medios con un cambio de aspecto físico. Sin barba y con el pelo rapado a diferencia de las pocas imágenes que se tienen de él, según confirman fuentes presenciales, el investigado ha logrado acceder al edificio sin ser fotografiado. Otros testigos presenciales, incluso, aseguran que podría haber llevado una peluca gris en el pasillo del juzgado para que no le reconocieran. Al final, la única imagen que se pudo captar fue la de su salida en el asiento trasero de un taxi.

La titular del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid le había citado este lunes junto al empresario mexicano Maximiliano Niederer, uno de los que han tenido problemas con la notificación. Los otros tres acusados estaban citados este martes por su participación en la presunta emisión de facturas falsas a la empresa de González Amador. Finalmente todos comparecerán el 24 de junio.

La investigación se centra en los supuestos indicios delictivos sobre hechos relativos al Impuesto de Sociedades correspondientes a los ejercicios de los años 2020 y 2021 y de un presunto delito de falsedad en documento mercantil al haberse aportado unas facturas que no se corresponden con servicios realmente prestados y aportados con la finalidad de minorar la cuota tributaria a satisfacer.

En el auto de apertura de diligencias, la jueza Inmaculada Iglesias razonó que supuestamente y «como consecuencia de estas conductas defraudatorias», González Amador ha dejado de ingresar a la Hacienda Pública estatal por el Impuesto de Sociedades de 2020 una cuota de 155.000 euros y por el impuesto de 2021, 195.951 euros. En total, cerca de 351.000 euros.

En cuanto a la causa relativa a la pareja de Ayuso, la Fiscalía investigó los hechos a raíz de un informe de la Agencia Tributaria que advertía de un presunto fraude fiscal al detectarse durante una investigación «unos gastos ficticios basados en facturas emitidas por diversas sociedades».

El pasado 22 de enero, la Fiscalía recibió un informe referido a la entidad Maxwell Cremona, propiedad de González Amador, del que se deduce «determinados datos e indicios que pudieran resultar constitutivos de delito». A raíz de este documento tributario, la Fiscalía acordó el pasado 23 de enero abrir diligencias de investigación, lo que derivó en la presentación de la denuncia en los juzgados de instrucción de Madrid.

La pareja de Ayuso declara este lunes después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) haya admitido a trámite la querella que interpuso él contra la fiscal jefe de Madrid, Pilar Rodríguez, y el fiscal encargado de su caso, Julián Salto, por un delito de revelación de secretos en relación a la nota difundida por la Fiscalía de Madrid en la que desmentía que le hubieran ofrecido un acuerdo al abogado de González Amador, cuando en realidad fue al contrario.

En este caso, el instructor ha citado el próximo viernes a las partes para que ratifiquen las querellas. Entre las diligencias, solicita identificar al máximo responsable de la Fiscalía que autorizó difundir el citado comunicado. El fiscal general Álvaro García Ortiz ya ha asumido todas las consecuencias que pudieran derivar de este asunto.