Borja Sémper | Portavoz nacional del PP

«La moción de censura a Sánchez está más que justificada, esperamos al momento oportuno»

- Con el concierto económico para Cataluña, y vista la rebelión interna en el PSOE, ¿ha traspasado Sánchez una línea roja mayor que la de la amnistía?

- Hemos aprendido a dejar de analizar sus palabras, porque siempre miente, y centrarnos en sus hechos, que demuestran que no tiene líneas de ningún color. Todo está supeditado al supremo interés de Sánchez, incluso cambiar por completo el modelo institucional y fiscal para poder investir a un presidente autonómico de su partido.

- En el caso de la amnistía, Feijóo se dio 24 horas para pensar si la aceptaría. ¿Al concierto también le habría dado una vuelta?

- Nosotros creemos que España necesita una revisión del modelo de financiación autonómica que piense en la sostenibilidad del sistema y que pasa necesariamente por la solidaridad entre territorios. Y eso tiene que hacerse con diálogo entre todas las comunidades.

- El sistema caducó en 2014, cuando el PP tenía mayoría absoluta en el Congreso y gobernaba 11 comunidades. ¿Por qué no lo hicieron entonces?

- Hay determinadas materias que por su trascendencia no se pueden hacer a golpe de mayorías de partido, sino a base de acuerdos de Estado. En todo caso, lo que en el 2014 era necesario hoy directamente es urgente.

- ¿Por qué el PP defiende el Concierto Económico de Euskadi y el Convenio de Navarra pero lo rechaza para Cataluña?

- No tienen absolutamente nada que ver. Los sistemas de Euskadi y Navarra tienen un marchamo constitucional inequívoco y eso significa que fueron votados por el conjunto de los españoles. Eso les confiere una legitimidad que un acuerdo entre Sánchez y ERC no tiene.

- ¿Pero no es contradictorio decir que el caso catalán «rompería la igualdad y la solidaridad» cuando al mismo tiempo defienden el vasco y el navarro?

- No, porque su naturaleza política también es diferente y viene incluso de antes de la Constitución. El modelo de financiación autonómica en España se diseñó partiendo de esa premisa, de esa singularidad.

- ¿Y esa singularidad no se le puede reconocer a Cataluña?

- Si alguien es capaz de demostrar que eso garantiza la solidaridad interterritorial... A mí lo que me sorprende es que éste no es un debate sustentado en ningún interés general o en un análisis de sostenibilidad del modelo, sino exclusivamente en los intereses del Partido Socialista.

- ¿Debería el PP catalán haber hecho más para que Illa no dependa del independentismo?

- El PP ha hecho todo lo que ha estado en su mano, pero lo único que ha recibido de Illa ha sido desprecio y un portazo.

- ¿No hay margen para replicar lo que el PP hizo con Patxi López? Es decir, apoyar a Illa para cortar el paso al nacionalismo.

- La diferencia es que Patxi López sí quería los votos del PP.

- ¿Es mejor un acuerdo PSC-ERC o unas nuevas elecciones que regalen otra oportunidad al secesionismo?

- Susto o muerte. Lo que creo es que los acuerdos deben ser razonables y sensatos, solucionar problemas y no generarlos. La alternativa de las elecciones es dramática porque la ciudadanía está harta. Pero en Cataluña ya sabemos que todo puede pasar...

- ¿El alineamiento de Esquerra con los socialistas da alas a entendimientos entre PP y Junts?

- Iremos viendo. Nosotros queremos seguir ensanchando nuestro espacio político para que cuando nos toque, esperemos que sea más pronto que tarde, podamos gobernar sin ataduras.

- Feijóo prometió activar una moción de censura «si la legislatura colapsaba». ¿Ha llegado ya ese momento?

- Estamos obsesionados en intentar reconducir la inestabilidad en la que ha sumido Sánchez a la política y una moción de censura tendría que estar encaminada en ese sentido. Lo haremos cuando consideremos que es oportuno, que aporta más beneficio que perjuicio.

- ¿Y eso no es ya? ¿O es que no merecería la pena presentarla sin tener los apoyos?

- En términos políticos, la moción de censura está mas que justificada desde hace tiempo. Lo que está haciendo Sánchez merecería una censura por parte de los españoles y una moción tendría que estar encaminada a la disolución de las Cortes y a la convocatoria de elecciones para que la ciudadanía se pronunciara, pero aún no está en nuestro calendario. Eso sí, a futuro tomaremos las decisiones que consideremos razonables para evidenciar que hay una alternativa. Y eso se puede hacer perfectamente con una moción de censura, claro.

- ¿Se han quitado un peso de encima con la ruptura de los gobiernos autonómicos con Vox?

- Yo le confieso que no he derramado una sola lágrima por la ruptura con Vox. Dijimos que nadie nos iba a hacer renunciar a nuestros principios y así ha sido.

- ¿Estaba lastrando el proyecto de moderación del PP?

- Bueno, es innegable que la presencia de Vox en gobiernos autonómicos ofrecía a Sánchez un hilo argumental que ya no tiene.

- Pero no será por que el PP le haya quitado ese argumento. Quien ha roto los pactos es Vox.

- Y los rompió porque el PP no ha renunciado a sus principios. Esa es la diferencia entre nosotros y Sánchez. Él está dispuesto a transmutar la naturaleza política de lo que siempre ha defendido su partido a cambio de mantenerse en el poder.

- ¿El divorcio con Vox les permite acercarse al PNV?

- El PNV tiene que decidir dónde está. Yo me pregunto por qué tiene esa actitud tan servil con Sánchez, por qué es cómplice y colaborador necesario de todo lo que está haciendo el presidente del Gobierno. El PP sigue siendo un partido abierto a acuerdos transversales, pero el PNV primero debe aclararse.

- Hablemos del 'caso Begoña Gómez'. ¿Cree que la instrucción está siendo todo lo ortodoxa que debería?

- Como político, tengo por norma abstenerme de analizar procesos judiciales. No somos contertulios ni fiscales ni nos dedicamos a juzgar. Lo que es relevante es que la mujer del presidente esté siendo investigada por tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Y eso políticamente es inaceptable, al margen de las posibles consecuencias penales que puedan dictaminar los tribunales.

- ¿Cuándo va a llamar el PP a Sánchez a declarar ante la comisión de investigación del Senado, donde tienen mayoría?

- Hemos esperado a que comparezca en el Congreso, ante la Prensa y a que lo hiciera 'motu proprio' con algo más que una carta a la ciudadanía. Pero no ha dado explicaciones y lo tendrá que hacer en el Senado cuando consideremos que es útil.

- ¿Temen que Vox capitalice todo este caso? Ya ejerció la acusación popular en el juicio del 'procés' y eso fue lo que le disparó.

- Nosotros tenemos claro que a quien hay que hacer oposición es a Sánchez y a su uso de las instituciones, no a su mujer.

- Acusan a Sánchez de «utilizar las instituciones del Estado» a su servicio. ¿No es contraproducente cuando acaban de pactar con él la renovación del Consejo General del Poder Judicial?

- El del CGPJ fue un buen acuerdo porque era necesario, pero eso no nos inhabilita ni debe hacernos callar ante lo que hace Sánchez. Nuestra obligación es hacer oposición y defender que la separación de poderes es sagrada porque es la esencia misma de la democracia.

- Hace unas semanas se supo que la 'policía patriótica' del PP espió a 69 diputados de Podemos con recursos de Interior. ¿No es eso lo que ustedes censuran?

- Cualquiera que haya utilizado los servicios del Estado valiéndose de su posición para enriquecerse o para influir políticamente debe dar cuenta ante la Justicia. Este Gobierno, el anterior y los que vengan, me da igual que sea del PP o del PSOE.

- El PP ha tumbado la toma en consideración de la reforma de la ley de extranjería. ¿No quieren dar siquiera oportunidad al debate parlamentario?

- Claro que estamos dispuestos al debate, pero es que el Gobierno no tiene política migratoria. Lo que plantea con los menores migrantes es un reparto de paquetería exprés y no puede ser eso. La solidaridad de las comunidades debe ir acompañada de recursos materiales y humanos.

- ¿Y en el entretanto? Si el reparto no es obligatorio por ley seguirá dependiendo de la voluntad del resto para ayudar a Canarias, una comunidad que ustedes mismos gobiernan.

- La buena voluntad está acreditada: el 81% de los inmigrantes acogidos en España lo están en comunidades gobernadas por el PP. Pero es que Sánchez es experto en trasladar a otros un problema que es suyo, porque la competencia migratoria es del Gobierno. Es una actitud irresponsable.