Emilio Silva

Presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica

«El ministro Bolaños no escucha a las víctimas»

El 23 de abril se exhumaron los restos de José Antonio de Primo de Rivera de Cuelgamuros, antiguo Valle de los Caídos. ¿Qué valoración le merece este nuevo paso?

Somos bastantes críticos con la Ley de Memoria Democrática. Nosotros presentamos un borrador para la reforma de la ley en 2019 que entregamos en mano a Pedro Sánchez y después nos hemos encontrado con que Félíx Bolaños, ministro de la Presidencia, no ha escuchado a las víctimas de la Guerra Civil y de la dictadura.

¿Cuáles son, según la ARMH, las carencias de la ley, que el PSOE defiende como una de sus medidas estrella?

-Un aspecto principal es que exista una partida en los Presupuestos para las víctimas de la represión y que la reparación no dependa de subvenciones que se tengan que disputar entre las familias.

¿Qué mejoras se deberían añadir, entonces, a la norma?

El País Vasco y Navarra han creado oficinas públicas donde los familiares de los represaliados pueden acudir a denunciar las desapariciones de sus allegados. Tampoco se menciona en la nueva ley el papel fundamental que jugó la Iglesia en la represión.

¿Resultan suficientes para la memoria histórica las exhumaciones de Franco, Primo de Rivera y Queipo de Llano?

Los restos de José Sanjurjo fueron trasladados desde Pamplona a Melilla, pero se hizo por orden del Ministerio de Defensa, que entonces dirigía María Dolores de Cospedal, en un helicóptero del Ejército y ahora permanecen en un cementerio destinado a héroes militares. Franco está en Mingorrubio en una cripta de titularidad pública que pagamos todos los españoles.

¿Resarce la Ley de Memoria Democrática a las víctimas?

La ley se compromete a resarcir a organizaciones políticas y sindicales que fueron expoliadas tras la Guerra Civil, pero no a personas ejecutadas, como fue el caso de mi abuelo. Persisten además cientos de monumentos del franquismo, y eso es prevaricación.