La mayoría de la investidura saca adelante la ley de paridad frente a PP y Vox

La norma exige la presencia de al menos un 40% de mujeres en las instituciones públicas, los consejos de administración de las grandes empresas que cotizan en el Ibex-35 o las candidaturas electorales de todas las fuerzas políticas.

La ley ha sido aprobada con dos polémicas enmiendas que se añadieron durante su tramitación en la Comisión de Igualdad. La primera, incorporada por PSOE y Sumar, es ajena al contenido de la ley y contempla la eliminación del veto del Senado al techo de gasto que proponga el Gobierno como paso previo a la aprobación de unos Presupuestos. La segunda enmienda fue una cesión de los socialistas a Podemos para asegurarse el apoyo de sus cuatro diputados. Establece que en casos justificados, las mujeres puedan copar el 100% en órganos de dirección del sector público y privado, una posibilidad que sí queda acotada para los hombres. «Hoy con los votos imprescindibles de Podemos hemos logrado romper esa cuota de hombres que era un problema estratégico», afirmó Ione Belarra, secretaria general de la formación morada.

El PP justificó su voto en contra tanto por la enmienda que elimina el veto del Senado al techo de gasto como por el pacto con Podemos. «Sánchez vende la paridad real por un puñado de votos, exactamente cuatro, los de Podemos, que han decidido que sólo se respete el límite de género infrarrepresentado cuando estemos hablando de mujeres», denunció el diputado popular Jaime de los Santos. Para Vox, directamente, esta ley de paridad es innecesaria, por mucho que exijan su aprobación las autoridades europeas.

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, respondió a PP y Vox y aseguró que la ley «limpiará esa suciedad que todavía impide que muchas mujeres sean libres y avancen».