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ADOLFO LORENTE
Viernes, 14 de febrero 2020, 19:45
Nicolás Maduro se regodeó este viernes al pronunciarse sobre la crisis generada en España en relación al encuentro celebrado en el aeropuerto de Barajas entre su 'números dos', Delcy Rodríguez, y el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, en la madrugada ... del 20 de enero. «Lo que hablaron fue secreto», señaló. Lejos de atajar de raíz la polémica y echar un cable al alto cargo del PSOE, el mandatario venezolano ironizó sobre la cita asegurando que se habló de «cosas muy interesantes». Además, aprovechó la ocasión para arremeter contra la oposición en España al asegurar que ha hecho «una novela, el 'Delcygate', siempre con la idea de perjudicar a Venezuela. Hay una campaña permanente en España contra Venezuela», zanjó.
Según su versión de los hechos, Delcy Rodríguez «pasó por el aeropuerto de España rumbo a una gira internacional». Una vez allí, «dejó» al ministro de Turismo, Félix Plasencia, que «estaba invitado a la Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur)». «Nuestro ministro estuvo más de una semana, compartió, saludó al Rey, compartió con los ministros del Gobierno de España y con empresarios españoles, muchos de los cuales quieren venir a invertir», apostilló.
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En relación a su vicepresidenta, se limitó a señalar que prosiguió una gira por varios países que fue «muy exitosa». Jugó al despiste. «Fue a algunos países en público y se conoció, y en otros fue en silencio para conversar cosas muy interesantes que nosotros estamos desarrollando con otros países del mundo», señaló en una rueda de prensa desde el Palacio de Miraflores sin entrar en más detalles.
Poco antes, en la misma comparecencia, Maduro desveló que ha trasladado a España y a otros «gobiernos amigos» -entre los que también mencionó a Argentina, México, Panamá y Rusia- su propuesta de crear un grupo de «países amigos» que se encargue de favorecer el diálogo en Venezuela. La idea de Maduro es que favorezca la celebración de «un diálogo inclusivo y soberano (...) para fortalecer la democracia» que se desarrolle «antes, durante y después» de las elecciones parlamentarias previstas para este año.
Por su parte, la vicepresidenta Carmen Calvo arremetió este viernes contra la oposición asegurando sin ambages que Venezuela es un tema que «no importa» a nadie. «Cuando quienes quieren que la política sólo sea un combate inútil de cosas que a nadie le importa, pongamos por caso Venezuela, nosotras haremos política con los problemas que duelen, como la dependencia, la vejez la manera de nacer o la interrupción voluntaria del embarazo», subrayó.
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