La comisión para la reconstrucción no fiscalizará la gestión del Gobierno

El exlehendakari será el encargado de pilotar el nuevo órgano tras imponerse su candidatura a la de la actual vicepresidenta segunda de la Cámara, Ana Pastor. López contó con el respaldo del PSOE y de la formación morada, pero también del PNV, Más País, Compromís y Teruel Existe. Sus socios de investidura de Esquerra Republicana, en cambio, optaron por la abstención al igual que Ciudadanos, EH Bildu y BNG. La aspirante del PP tan sólo sumó los apoyos de su partido después de que Vox se negase a participar por considerar vulnerado el reglamento. La formación de Santiago Abascal exigía que la votación se realizara mediante voto secreto y no a mano alzada como se había acordado por «salubridad».

El expresidente del Congreso, consciente del complicado clima político, conminó a todos los partidos a dejar de lado los «enfrentamientos» y las «rencillas partidistas» y hacer un esfuerzo por entenderse y trabajar unidos por el futuro de España. «No venimos a ganar o a perder -aseveró- sino a entendernos para alcanzar juntos los acuerdos que exige el país».

El dirigente socialista invitó además a los participantes a huir de la polémica y actuar con «altura de miras» y «sentido de Estado» para buscar «una salida global» a la crisis generada por la pandemia. «Ni se nos ocurra por cuestiones partidarias deslizarnos por la pendiente del desacuerdo. Propongamos medidas y busquemos acuerdos», advirtió López. En su opinión, «no hacer nada no es una opción» porque la crisis económica y social «se va a agravar y puede tener efectos devastadores».

El diputado del PSOE enumeró los objetivos del nuevo órgano de trabajo insistiendo en la necesidad de reforzar el sistema de salud pública, impulsar a las empresas para recuperar el empleo cuanto antes y «tejer la más tupida red de solidaridad» instando, además, a la Unión Europea a ponerse a disposición del «rescate ciudadano».

La comisión comenzará a trabajar la próxima semana. Lo primero será aprobar el plan de funcionamiento, el calendario, los contenidos a abordar y definir las comparecencias. Es en este punto, donde pueden provocarse las primeras fricciones entre el PSOE y el PP. Los populares reclaman incluir las libertades públicas como área de trabajo y piden también que se pueda citar a todos los cargos públicos que han estado tomando decisiones importantes en estas semanas.

Los socialistas, de momento, quieren limitar las comparecencias a expertos de las distintas materias a abordar que giran en torno a cuatro ejes: el refuerzo de la sanidad pública; la reactivación de la economía y la modernización del modelo productivo; el fortalecimiento de los sistemas de protección social, de los cuidados y la mejora del sistema fiscal. Por delante tienen dos meses de trabajo, aunque prorrogables, para presentar sus acuerdos y conclusiones.