Un juzgado imputa desobediencia a cinco mossos por el 1-0

En una providencia comunicada el pasado 29 de noviembre, el titular del juzgado abrió una causa apoyado por la Fiscalía de Barcelona como consecuencia de la denuncia de un particular relacionada con el comportamiento concreto de incumplimiento de obligación de perseguir delito de los Mossos que actuaron en un colegio del 1 de octubre. Ese día se celebró el referéndum ilegal y en varios centros educativos se pusieron urnas, como ocurrió en el colegio Pere Calders de Polinyá, localidad próxima a Sabadell.

Además de tomar declaración a los dos mossos, el juez ha requerido a la dirección del centro para que “con la mayor brevedad posible” identifique a la persona que ejerció el cargo o las funciones de director del mismo entre los días 27 de septiembre y 1 de octubre. “Una vez identificada, recábense sus antecedentes penales y cítese a la misma para que preste declaración en calidad de investigada, para plena garantía de sus derechos, por un posible delito de desobediencia a la autoridad judicial”, según la providencia.

Asimismo, a la vista de las declaraciones como investigados de los dos agentes, el juez requiere también al Cuerpo que en un plazo máximo de cinco días remita al juzgado copia de las instrucciones que por escrito se hubieran entregado a los agentes para su actuación en relación a los acontecimientos del 1 de octubre y que identifiquen a los mencionados en esas declaraciones como inspector y subinspector, responsables de la Sala Regional del Complejo Central Egara, así como al jefe de la Comisaría de Santa Perpetua de Mogoda.