La jueza deja en libertad al último jefe de ETA

Tardón, en consonancia a lo reclamado por la Fiscalía, le ha impuesto como únicas medidas cautelares la prohibición de salir de España y comparecencias semanales en el juzgado más próximo del lugar donde decida residir, siempre dentro de territorio nacional.

La magistrada ha adoptado esta decisión después de que la Fiscalía planteara la posibilidad de que su procesamiento en la causa de Halboka, el frente jurídico-carcelario de ETA, por un delito de integración en organización terrorista sea cosa juzgada al haber cumplido ya en Francia una pena por un delito análogo, el de asociación de malhechores.

Tardón, a la hora de no mandar a la cárcel a Pla mientras se aclara si puede o no ser enjuiciado de nuevo ha tenido especialmente en cuenta que el etarra no ha intentado huir tras su excarcelación y, de hecho, «ha aportado documentación justificativa del cumplimiento de las medidas acordadas por las autoridades judiciales francesas«.

Tardón ha rechazado las alegaciones de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que reclamaba prisión incondicional para el etarra por entender que el delito de integración en banda de malhechores por el que Pla cumplió cuatro de los cinco años a los que fue condenado en Francia se circunscribe a su militancia en ETA de 2010 a 2015 mientras que su supuesta participación en Halboka dataría de 2008. La magistrada tampoco ha atendido la petición de la defensa de que se dejara al exjefe etarra salir de España puesto que tiene una hija de cuatro años escolarizada en el País Vasco francés.

El excabecilla de ETA, que ante la juez ha reconocido su militancia en la organización terrorista, fue capturado el pasado 13 de febrero cuando acudió a fichar a la comisaría de Hendaya, localidad donde vivía bajo vigilancia, después de que el Tribunal de Apelaciones de París aceptara el pasado 20 de noviembre la euroorden emitida en 2011 por el hoy ministro del Interior y entonces instructor de la Audiencia Nacional, Fernando Grande-Marlaska.

Un año antes, en 2010, Grande-Marlaska señaló al exmiembro del 'comando Zaragoza' como «correo» entre la estructura creada por la banda para gestionar todo lo relativo a su colectivo de presos y el abogado Jon Enparantza. Como hoy, Pla quedó en libertad tras ser detenido por entonces en Hendaya.

Pla, que quedó en libertad el pasado 18 de abril tras cumplir su condena, tras su paso por Halboka se habría integrado en la cúpula de la banda. Identificado como uno de los tres encapuchados que anunciaron en un vídeo en octubre de 2011 el cese definitivo de la actividad criminal de ETA, en 2012, junto a José Antonio Urrutikoetxea, 'Josu Ternera', se desplazó a Noruega a la espera de que el Gobierno español enviara una delegación para abrir un proceso de negociación. En febrero de 2013 fueron expulsados del país nórdico al negarse el Gobierno de Mariano Rajoy a negociar.