Hallan una treintena de vacas muertas en un pueblo de Cantabria

La dantesca escena se la encontraron los ganaderos cuando fueron a buscar sus vacas. Según la Guardia Civil, los hombres relatan cómo dejaron a las reses pastando fuera, en una finca, pero al llegar a recogerlas este domingo no las encontraron. Más tarde, accedieron a la cuadra pasiega y fue cuando descubrieron que estaban dentro amontonadas. El recinto, ubicado en el barrio de Carcabal, estaba «cerrado por dentro», según explican diversas fuentes municipales y la principal teoría es que, dada la falta de ventilación y el hacinamiento, hayan podido morir «por axfisia». Al menos esa es la versión inicial que manejaban ayer los vecinos, incluido el alcalde de San Roque, Antonio Fernández, que se trasladó por la noche al lugar, pero que declaró no tener muchos más datos de lo sucedido.

El director general de Ganadería, Julián Vélez, explicaba a preguntas de este periódico que, según lo que les iban comentando, los animales estaban encerrados porque la tranca de la puerta estaba caída «por dentro» de la cuadra. No obstante, prefería no aventurarse ante ninguna hipótesis antes de que la Guardia Civil haga su investigación.

Lo que sí confirmó es que los animales, según la versión de los ganaderos, estaban sueltos en un recinto al aire libre y se les encontró luego en la cuadra. «Nosotros hemos enviado allí al jefe de sección para saber qué es lo que está pasando y ver en qué se puede ayudar», explicaba.

El rescate de las vacas del interior de la cabaña va a ser más complicado. Según explicó el responsable de Ganadería, cuando han logrado abrir el acceso para acceder a las vacas y han llevado «un tractor» para sacar a los posibles animales que aún estaban «vivos», se han dado cuenta de que «no podían acceder sin equipos especiales», debido a los gases que se desprendían desde el interior por el hacinamiento y los animales muertos.

Por ello, según se explicó, seguramente se terminará el trabajo de extracción de todos los cuerpos a lo largo de hoy.