No es una guerra pero hace falta valor

Para Zarranz, el Ejército tiene también una serie de valores que son necesarios para enfrentarse a crisis como una guerra y que son también claves a la hora de vencer la pandemia. «En el Ejército aprendemos cuestiones como la jerarquía, la disciplina, la unidad, el compañerismo o la voluntad de vencer. Son condiciones indispensables para salir adelante en situaciones difíciles y que impregnan toda la vida militar. Ante una crisis, se vuelven necesarias para salir adelante». En este sentido, la disciplina es algo que todos los expertos, tanto psicólogos como médicos, están presentando como clave para defenderse ante el coronavirus o superar las condiciones del confinamiento.

«Todos sabemos lo que es la disciplina y siempre que dicho que no es algo exclusivo de la vida militar. Hay empresas de todo tipo con una grado de disciplina. Pero la cohesión y la jerarquía sí que son típicamente militares», destaca el general. Para él, la obediencia también es una de las características que hace que el Ejército esté especialmente preparado para hacer frente a la pandemia. «En los cuarteles se practica el orden cerrado, el desfile. Es una forma de automatizar la obediencia para personas que tienen que hacer algo que en condiciones normales no querrían hacer», agrega.

La obediencia, en este sentido, es algo que está quedando en entredicho estos días cuando se ven las imágenes de personas que desafían las reglas establecidas para el confinamiento y abandonan sus hogares sin razón alguna. «Es un error considerar que estamos buscando borregos. En el Ejército se busca a personas con carácter, con personalidad, pero que sepan trabajar en equipo y seguir las normas», explica Zarranz.

El general retirado ve con esperanza que muchos de los valores necesarios para contrarrestar la crisis se están viendo en el día a día de colectivos como los médicos, los enfermeros, los miembros de las fuerzas de seguridad. «Están actuando con una fuerza que es intrínseca a los valores de la vida militar y que son necesarios ante una crisis de este tipo». Pero Zarranz resalta también otras necesidades como la unidad de mando o la acción de conjunto. «La voluntad de vencer, la intención de enfrentarse a una situación para superar un momento complicado, es necesaria, pero no sirve de nada sino no hay una dirección clara. Es más, puede ser contraproducente si alguien se pone a tomar iniciativas sin tener en cuenta que existe una estrategia», explica el exgeneral.

Y en ese contexto, el individualismo es uno de los objetivos a eliminar ante una crisis como la creada por el COVID-19. «En Bosnia, por ejemplo, hubo que dictar normas especiales para que los legionarios entregasen toda su comida a los niños. Hay una serie de valores sociales, de saber que hay algo por encima de ti ante lo que debes responder que en el Ejército se insertan en la vida diaria y que ahora estamos viendo en muchos sectores de la sociedad que están luchando en primera línea en las ambulancias o los supermercados, por ejemplo».