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Las vacaciones estivales de Pedro Sánchez, que desde el martes disfruta de varios días de descanso en Marruecos, han despertado el malestar no solo de PP y Vox, también de varios partidos que forman parte de Sumar, como IU y Podemos, y del Frente Polisario. ... El movimiento de liberación saharaui criticó a través de un comunicado el viaje del presidente en funciones, que consideran una muestra «del indiscutible apoyo» de España «a un decadente régimen que vulnera de forma sistemática, diaria e impune los derechos humanos del pueblo del Sáhara».
En la nota, emitida por el delegado del Polisario en España, Abdulah Arabi, expresan que aunque se haya «circunscrito al ámbito estrictamente privado», la elección «conlleva aparejado un enorme contenido político que va mucho más allá».
Desde Moncloa llevan varios días justificando el desplazamiento alegando que Sánchez viajó en un vuelo regular y se ha costeado la estancia «de su propio bolsillo». La ministra portavoz en funciones, Isabel Rodríguez, salió este jueves al paso de esta polémica asegurando que «el presidente tiene todo el derecho del mundo a viajar» a Marruecos,y que poner el foco sobre la cuestión, apostilló la dirigente socialista, «forma parte de una estrategia que se demostró fracasada el 23-J».
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Sin embargo, lo que ha molestado especialmente a algunas formaciones del arco parlamentario es, como han insistido estos días, el destino vacacional elegido. En mayo del año pasado y por sorpresa, el Ejecutivo –sin el respaldo del socio minoritario de la coalición, Unidas Podemos– dio un giro histórico en la política exterior al asumir las posiciones de Rabat sobre un discutido estatus de autonomía para los saharauis a cambio de restablecer y reforzar las relaciones con el país vecino. Todo ello tras la crisis por el acogimiento secreto en España del dirigente del Frente Polisario Brahim Ghali para darle tratamiento médico. «A lo largo de este año y medio ha quedado constatada la unilateralidad del radical giro de Sánchez. Una postura que fue rechazada por la sociedad civil española de manera inmediata», expresa el Polisario el comunicado.
Este jueves, una vez manifestado el Polisario su posición, desde varios sectores de la izquierda lanzaron andanadas contra el presidente en funciones. En Podemos, la eurodiputada Idoia Villanueva, cargó contra a Sánchez por «mostrar su complacencia con Marruecos, día tras día, y mientras Marruecos sigue vulnerando los derechos fundamentales con total impunidad». En un mensaje publicado en sus redes sociales, apoyó además el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui.
Los morados no han sido las únicas voces discrepantes desde Sumar, Izquierda Unida también respaldó el comunicado del Polisario al considerar que el viaje de Sánchez evidencia que España apoya a un «régimen» que «vulnera los derechos humanos» con impunidad. «Seguiremos luchando frente a quienes ignoran el derecho internacional y la brutalidad de la ocupación marroquí», lanzaron desde la cuenta oficial del partido.
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