El PP ficha a los dos diputados expulsados de UPN que casi tumban la reforma laboral

El anuncio se ha hecho oficial tras la reunión que Sayas y Adanero, que habían fundado una plataforma, han mantenido esta mañana en la sede del PP en Navarra con el presidente regional del partido, Javier García, y la secretaria general, Amalia Salanueva. El PP se presenta a las elecciones forales y municipales de mayo «como única alternativa para combatir el nacionalismo y el socialismo», según ha defendido hoy el propio García, que mantiene una guerra abierta con UPN, al que ha acusado de «haber roto los lazos».

Ambos partidos, PP y UPN, acudieron a los anteriores comicios en coalición con Ciudadanos bajo el nombre de Navarra Suma, una fórmula descartada ya por la crisis interna de la plataforma, un vaso que ha ido colmándose durante toda la legislatura y que la negociación de los populares con Sayas y Adanero, a espaldas de UPN, terminó de rebosar. Ambos diputados han confirmado su integración en las filas del PP en una rueda de prensa ofrecida junto con Javier García y, aunque su situación en el Congreso aún no está clara (UPN los suspendió de forma temporal), ya han adelantado su predisposición a afiliarse a la formación que lidera Alberto Núñez Feijóo.

El PP no se presenta en solitario a las autonómicas en Navarra desde 2015. Ahora trabaja en abrir un espacio electoral propio, objetivo que nunca ha conseguido, y trata de aglutinar el voto de centro derecha para evitar un desastre electoral en los comicios que se celebrarán en mayo. El fichaje de Sayas y Adanero confirma esa estrategia, que pasa por debilitar a UPN y arañar votos entre el electorado descontento con el pacto de investidura entre Sánchez y Bildu. El propio García ha criticado hoy que la gobernabilidad «descanse en un partido como EH Bildu, cuya finalidad es la desaparición de Navarra».

Desde UPN no se han mostrado sorprendidos por la noticia, que daban por hecha desde que sus diputados díscolos votaron en contra de la reforma laboral pese a que la formación regionalista les había trasladado la existencia de un acuerdo cerrado con el PSOE, pacto que ignoraron para votar en sintonía con el PP, por entonces liderado por Pablo Casado. Con la incorporación, los populares oficializan lo que ya era una realidad en el Congreso: en la práctica tienen dos votos más de los obtenidos en las elecciones generales.