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El concierto económico para Cataluña sellado entre el PSC y Esquerra a cambio de la investidura de Salvador Illa continúa provocando división en las filas socialistas a medida que más figuras de la vieja guardia socialista alzan la voz en contra. Este miércoles, el ... expresidente del Gobierno Felipe González volvió a elevar la presión contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez cargando contra el pacto que, a su juicio, supone «un regalo al independentismo» cuando está más débil y que «rompe la solidaridad entre territorios».
González considera que los diputados del PSOE en el Congreso de los Diputados no podrán defender en sus propias comunidades el acuerdo. «Yo de ninguna manera votaría esa soberanía fiscal para los ingresos que se ofrece a Cataluña», afirmó, aludiendo al dilema al que se enfrentarán los representantes socialistas cuando tengan la facultad de apoyar la reforma de la ley orgánica de financiación de las comunidades autónomas –conocida como la LOFCA– y necesaria para aplicar el concierto. Una postura que también vienen alentando desde el Partido Popular entre los militantes descontentos para frenar el nuevo modelo de financiación.
El histórico líder socialista argumenta que él es leal a lo que el PSOE decidió en su congreso, en la Declaración de Granada de 2013 y en los sucesivos programas electorales. «Cada uno tiene que asumir su propia responsabilidad», señaló, aunque le «tranquiliza» la convicción de que no habrá ninguna comunidad autónoma que lo acepte en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) por el que tiene que pasar antes de aprobarse.
Ante la investidura de Illa, la reacción del PP a nivel legislativo ha sido presentar este miércoles en el Congreso una petición de comparecencia urgente de María Jesús Montero. Los populares consideran que la ministra de Hacienda debe explicar cuanto antes las consecuencias del pacto fiscal para Cataluña y para el resto de las comunidades autónomas. «Montero debe explicar qué va a pasar cuando se rompa la caja única que justifica la unidad económica de España y cómo se van a pagar los servicios públicos tras el acuerdo del PSOE con ERC», ha señalado este miércoles Esteban González Pons, vicesecretario de Institucional de la formación conservadora.
La formación que lidera Alberto Núñez-Feijóo avanza que lo que se vivirá este jueves en el Parlament de Cataluña es «el último esperpento» de los gobiernos de Pedro Sánchez, a quien Pons acusó primero de comprar la presidencia del Gobierno y ahora hacer lo mismo con la de la Generalitat de Cataluña en beneficio de Illa. «Un ridículo, no solo institucional, sino también político e internacional», añadió González Pons.
El dirigente popular planteó la posibilidad de que la Comunidad de Madrid, Andalucía o la Comunidad Valenciana, al igual que ha hecho Cataluña, exigieran un concierto fiscal. «Una España en la que todo el mundo se lleva dinero y nadie pone dinero es una España inviable», concluyó.
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