Feijóo refuerza su aval a la oposición a Maduro con un acto con Corina Machado

El jefe de la oposición española pretende de esta forma expresar el apoyo incondicional de su partido a Venezuela, y al mismo tiempo, el rechazo frontal al régimen de Nicolás Maduro. El encuentro entre ambos líderes –que lleva por título '28J: el día que ganó Venezuela' (en alusión a los comicios en los que Maduro se atribuye y buena parte de la comunidad internacional cree manipulados) y que clausurará Miguel Tellado, portavoz parlamentario del partido– se producirá días después de que Feijóo recibiese a Edmundo González en el Congreso. Una cita en la que el PP escenificó su respaldo al «presidente electo» de Venezuela e incidió en la denuncia del «fraude electoral».

Y lo hará, también, en un contexto de cuestionamiento del papel desempeñado en suelo venezolano por el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, quien confirmó este martes su conocida aunque enigmática «tarea de facilitación» para sacar a González de Venezuela y trasladarlo a España, donde gozará de asilo político. Zapatero –que reaparecía tras dos meses de silencio en la presentación de un libro– eludió cualquier crítica al régimen de Maduro, lo que alienta el reproche de los populares sobre que su mediación es, en realidad, colaboracionismo con el régimen.

Venezuela ha sido uno de los principales motivos de fricción en este inicio de curso político entre la Moncloa y el PP, que ha llegado a acusar al Gobierno de Sánchez –no solo a Zapatero– de «connivencia» con Maduro. En concreto, y después de que Edmundo González denunciara las «coacciones» que sufrió en la Embajada española en Caracas por parte de dos altos cargos del régimen de Maduro para salir del país–, el responsable del área internacional del PP, Esteban González Pons, apuntó al Ejecutivo por estar supuestamente «implicado en «el golpe de Estado» contra las libertades.

A la espera del eco que tenga el encuentro de hoy de Feijóo con Machado, Pedro Sánchez se refirió también ayer a la coyuntura venezolana al ser preguntado por la misma en el contexto de su participación en la Asamblea de la ONU en Nueva York. El presidente no se movió de su guion político –«Es importante recordar que la solución debe ser construida por el propio pueblo de Venezuela, desde allí, y España y la Unión Europea deben crear las condiciones para que obtengan esa solución», dijo–, al tiempo que volvía a reclamar «toda la información» sobre los dos bilbaínos detenidos por el chavismo para poder proporcionarles apoyo consular. Cuando están a punto de cumplirse dos semanas del arresto, no hay noticias de ellos.

La crisis venezolana también acaparó protagonismo durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso. Margarita Robles evitó reafirmarse en su calificativo del Gobierno de Maduro como una dictadura después de que el PP le retase a repetirlo. Fue Belén Hoyo, diputada popular, quien le pidió «atreverse de nuevo a verbalizar lo que piensa la mayoría de la comunidad internacional y los españoles». Robles ironizó con que la próxima vez invitará a Hoyo a la presentación de un libro –fue el evento en el que lo dijo– para que «no necesite que le vuelvan a repetir» lo que allí diga y «lo oiga de primera mano». Por el otro flanco, Ione Belarra, líder de Podemos, censuró la «hipocresía» de no dar asilo a 30 activistas saharauis y sí recibir a «opositores venezolanos peligrosos».

Además, Feijóo –antes de la cita con Corina Machado– clausura mañana a las 12:30 horas, el Campus FAES «La renovación de la Unión Europea», en el que también participan José María Aznar, expresidente del Gobierno –y presidente de la fundación–, Roberta Metsola, presidenta del Parlamento Europeo; y Javier Zarzalejos, eurodiputado y director de la citada fundación.