Feijóo mantiene el pulso a Vox y reafirma su «solidaridad» en la acogida de los menas

«La práctica que hemos tenido en España es ser solidario en la recepción de menores si tenemos capacidad. Las comunidades pondrán a disposición sus recursos para atender a los menores», aseguró el jefe de la oposición al ser preguntado por los medios al respecto. Feijóo no aludió de forma directa al líder de Vox, pero sí quiso incidir, como ya hizo hace diez días ante el primer amago de divorcio de Vox, en la disposición de los territorios gobernados por el PP a ser «solidarios» con Canarias, donde la presión migratoria supera ya los límites asumibles.

El propio Abascal había comparecido poco antes en la sede de Bambú 12 para instar al PP a utilizar «todos los medios políticos y legales» a su alcance para evitar la distribución de esos menores. Una amenaza en la que Vox lleva insistiendo semanas y que Abascal volvió ayer a poner encima de la mesa como una opción factible. El líder vasco también vinculó a los menores inmigrantes con el aumento de la delincuencia y de la «inseguridad» en la ciudadanía, y señaló que su partido no quiere ser cómplice de los «robos y violaciones».

Aún así, no solo a Abascal quiso mandarle ayer un mensaje el jefe de la oposición. Feijóo también endureció su discurso contra Pedro Sánchez en este asunto al insistir sí, en la solidaridad, pero también en la imposibilidad de que el resto de las autonomías asuman nuevas responsabilidades sin los medios necesarios (los populares están pidiendo 500 millones más). El expresidente gallego acusa al Gobierno de carecer de una política de inmigración con la que hacer frente al desafío que está generando la creciente llegada de cayucos -y en ellos, de niños y adolescentes- a las islas.

El Gobierno tiene previsto abordar el reparto de los inmigrantes menores no acompañados (menas) llegados a Canarias en la reunión de la Conferencia Sectorial de Infancia y Adolescencia mañana en Tenerife. Y a eso hizo referencia ayer Feijóo al quejarse de que, hasta el momento, la Moncloa no se haya dirigido a los gobiernos autonómicos para ir engrasando un encuentro crucial. «El Gobierno ni tiene política migratoria, ni soluciona estos problemas. Los crea. Tiene abandonadas a las comunidades autónomas. No habla con ellas, no se reúne con ellas», reprobó.

Génova adelantó días atrás de que aceptará el reparto de esos inmigrantes menores si se alcanza un acuerdo con el beneplácito de todas las comunidades. A lo que los populares sí se muestran más reacios es a la reforma de la ley de extranjería que el Gobierno pretende llevar a cabo y cuyo texto espera tener aprobado antes de que termine el verano.

Asimismo, el discurso de ayer de Feijóo insiste en el argumento esgrimido ya por el PP hace una semana, cuando los barones del partido reunidos en Salamanca con motivo de la presentación de la EBAU común se dijeron favorables a a recibir a los menas en sus comunidades, pero alertando de las dificultades que tienen muchas de ellas para acogerlos debido a la masificación de sus centros.

Feijóo respondió al evite de Vox al término de su intervención en la Cámara catalana, en la que estuco acompañado por el líder autonómico de su partido, Alejandro Fernández. Desde 2017, el trance más crítico del 'procés', un presidente del PP no protagonizaba una visita similar, algo que Feijóo subrayó.