El expresident vuelve al foco internacional arropado por la plana mayor de Junts

Poco antes de las 11.00 horas la expectación era máxima. Las cuatro primeras filas estaban reservadas para la plana mayor de Junts per Catalunya, que han recibido a Puigdemont en pie y con aplausos. En primera fila, el exconseller huido Toni Comín, la expresidenta del Parlamento catalán, Laura Borrrás, y el exdiputado de la cámara catalana, Jordi Turrull, entre otros. Entre los asistentes también se ha podido ver al consejero de Economía y Hacienda de la Generalitat, Jaume Giró i Ribas, la exconsejera de Acción Exterior, Victoria Alsina, así como al rapero Valtònyc, fugado de la Justicia española y residente en Bélgica desde 2018, y dirigentes de ERC y la CUP.

Noticias Relacionadas

Así ha sido la comparecencia de Carles Puigdemont

Cristina Cándido

Puigdemont exige la amnistía antes de la investidura y un compromiso histórico con la autodeterminación

Cristian Reino

De pie, junto a la bandera europea y la señera, el líder independentista se ha dirigido al público en catalán. En ocasiones leyendo y mirando a las primeras filas -donde se podían ver numerosos broches con lazos amarillos- Puigdemont ha intervenido durante casi media hora, mientras el ambiente de la sala se volvía agobiante por el calor. Es más, ha habido quien ha echado mano de su abanico de cartón de Junts para tratar de refrescarse. Al concluir el discurso, Puigdemont ha sido ovacionado por sus simpatizantes, que han aplaudido en pie. El expresidente catalán ha abandonado inmediatamente la sala, seguido por varias cámaras y fotógrafos.

Minutos después, Teresa Jordà (ERC), ha comparecido para sumarse a las exigencias del líder catalán y ha pedido que el Gobierno tramite una ley de amnistía. Un espontáneo ha interrumpido la intervención de Jordà al grito de «¡Viva España!» y «Puigdemont, a prisión».