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El expresidente de Puertos del Estado Francisco Toledo ha declarado este viernes en calidad de testigo en 'el caso Koldo'. El compareciente ha defendido ante el juez instructor de la Audiencia Nacional Ismael Moreno que Soluciones de Gestión, la empresa bajo sospecha con la que ... se contrató la compra de ocho millones de mascarillas por 20 millones de euros en marzo de 2020, tenía el aval del Ministerio de Transportes.
Fuentes jurídicas consultadas presentes en el interrogatorio han señalado que Toledo explicó que cuando le colocaron en el portafirmas el contrato con esa empresa le recalcaron que contaba con ese aval, pero ha señalado que él no mantuvo ningún contacto previo para adjudicar este servicio ni con el Ministerio de Transportes, entonces dirigido por José Luis Ábalos, ni con algún responsable de la citada compañía. Es decir, sostuvo que aquella adjudicación fue decidida de antemano por el ministerio y que así se lo comunicó el entonces secretario general de Puertos, Álvaro Sánchez Manzanares.
Así, el que fuera presidente de Puertos hasta diciembre de 2021 -entidad pública dependiente de Transportes- ha negado tener responsabilidad en esa contratación más allá de la firma del documento contractual (es decir, no le competía hacer seguimiento del contrato o de los pagos), pero sí ha explicado que él fue quien aconsejó adjudicar la distribución logística del citado material con la empresa Raminatrans -algo que ya explicó ante la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en febrero- dado que la conocía de su época en una delegación de Puertos ubicada en Castellón.
Sin embargo, dos funcionarias que declararon también como testigos en el juzgado han contradicho en cierto modo el alegato de Toledo, al asegurar que sí tenía competencias en materia de contratos como titular del organismo. Se trata de la jefa de Contratación y Gerencia de Riesgos, Aránzazu de Miguel, y la jefa de contratación adscrita a la Secretaría General de Puertos del Estado, María Belén Caballero.
Durante el interrogatorio, según las fuentes consultadas, se le ha mostrado también un correo electrónico suyo en el que se incluía la siguiente frase: "He hablado con José Luis", pero Toledo ha negado conocer quién era ese "José Luis", por lo que no ha apuntado al exministro Ábalos. Lo que sí que ha subrayado ante el juez es que él presionó para que la empresa Soluciones de Gestión trajera a España las mascarillas cuanto antes. Esto fue así, ha recordado, porque la empresa estaba teniendo problemas con los fletes de los aviones.
Sobre Koldo García, asesor de Ábalos en el ministerio entre 2018 y 2021, e investigado por mediar presuntamente a favor de la empresa de la trama a cambio de comisiones, Toledo indicó que le conoció después del contrato sellado por Puertos del Estado. Asimismo, una de las funcionarias ha sido preguntada por un correo, que obra en la causa, en el que escribió el comentario "solo espero no acabar en el Manzanares con una losa de hormigón en los pies". La testigo lo ha enmarcado en un trato coloquial y ha indicado que en esos momentos había mucha tensión por la pandemia y la falta de material sanitario.
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