Secciones
Servicios
Destacamos
David S. Olabarri
Viernes, 28 de julio 2023, 09:33
El Gobierno vasco concedió ayer un permiso al preso de ETA Mikel Otegi para que se trasladase desde la cárcel alavesa de Zaballa al dentista sin ningún tipo de custodia policial, según ha podido saber EL CORREO. El recluso todavía tiene pendientes más de 10 ... años de condena por el asesinato de dos ertzainas en 1995 y su posterior huida a Francia. El permiso fue concedido por Administración Penitenciaria, un organismo dependiente del Departamento vasco de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales. El Ejecutivo autonómico asumió la competencia de las tres prisiones vascas en octubre de 2021, tras el acuerdo suscrito con el Ministerio del Interior. Portavoces de la consejería aseguraron anoche que estas salidas sin vigilancia están previstas en la normativa vigente.
Otegi, que en 2012 fue condenado a 34 años de prisión, tenía prevista ayer una cita con su odontólogo. Como suele ser habitual, una patrulla de la Brigada Móvil, que se encarga de conducir a presos, acudió a la cárcel para custodiarle durante esa visita médica. Su traslado figuraba en el orden del día de la unidad. Sin embargo, según las fuentes consultadas por este periódico, cuando llegaron les dijeron que no era necesaria su intervención, ya que existe una orden de Administración Penitenciaria que le concedía una salida «autogestionada». Es decir, que el propio Otegi se iba a encargar de salir y volver a la cárcel por sus propios medios.
Esta orden ha causado sorpresa e indignación entre los agentes que se dedican al traslado de presos. Según las mismas fuentes, no es la primera vez en los últimos meses que se concede un permiso de estas características a un recluso de ETA. Pero agentes con décadas de experiencia en el cuerpo insisten en que «jamás» habían visto que se concediese una autorización de estas características a ningún interno que tenga una larga condena por delante. Tampoco se lo conceden a los reos que no tienen delitos de sangre.
Diciembre de 1995. Mikel Otegi, militante de Jarrai, asesina con una escopeta a dos ertzainas que acudieron a su casa a multarle.
Marzo de 1997. Un jurado popular le absuelve al considerar que no era dueño de sus actos cuando disparó a los dos agentes.
1997. El Tribunal Superior ordena repetir el juicio. Otegi había huido a Francia, donde se integra en ETA.
2003. Es detenido en el país vecino por pertenencia a banda armada. En 2009 es trasladado a España tras cumplir su pena allí.
2012. El Tribunal Supremo confirma la condena de 34 años por los dos asesinatos.
Abril de 2022. Es trasladado a la prisión alavesa de Zaballa.
Mikel Otegi asesinó el 10 de diciembre de 1995 en la localidad guipuzcoana de Itsasondo a los ertzainas Iñaki Mendiluze y José Luis González. Según la sentencia del Tribunal Supremo, que en 2012 le condenó a 34 años de cárcel, Otegi, vecino de ese municipio guipuzcoano y militante de Jarrai, había tenido ese día un encontronazo con un ertzaina vestido de paisano, al que golpeó y llamó «cipayo». Luego se fue de fiesta a un concierto y volvió a su caserío conduciendo a «excesiva» velocidad. Dos ertzainas le vieron al volante de forma extraña y le siguieron. Cuando los agentes acudieron a su casa para multarle, les disparó a menos de dos metros y por la espalda con una escopeta de caza.
Más tarde cogió la emisora de radio de la patrulla y llamó a la comisaría: «Batasun, batasun. Para 1035. Un casero ha matado a dos cipayos por la política que seguís», les dijo. Después se dirigió a uno de sus vecinos: «Dos hijos de puta menos». Las víctimas eran Iñaki Mendiluze, natural de Zumarraga de 26 años que planeaba casarse, y José Luis González, vecino de Galdakao de 34 años cuya esposa estaba embarazada de siete meses.
Otegi fue detenido y juzgado por un jurado popular en San Sebastián. En marzo de 1997 el tribunal popular, compuesto por nueve personas, le absolvió al considerar que no era dueño de sus actos cuando disparó contra los dos agentes. También tuvieron en cuenta que «se arrepintió» y que sufría un trastorno psíquico consistente en «una personalidad propensa» a creerse acosado «por la Ertzaintza».
Cinco días después Otegi fue puesto en libertad. Poco después el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco anuló el juicio y ordenó que se repitiera la vista oral. Para entonces había huido y fue imposible encontrarlo. Fue declarado prófugo y se dictó una orden de busca y captura.
Otegi aprovechó para escapar a Francia, donde se incorporó a ETA. En 2003 fue detenido y poco después fue condenado por pertenencia a banda terrorista. Una vez cumplida la pena, en 2009 fue entregado a España. Y en 2012 el Tribunal Supremo confirmó los 34 años por el asesinato de los dos ertzainas. En 2017 sufrió un infarto en la prisión de Toledo. En abril de 2022 fue trasladado desde la cárcel de Pamplona a Zaballa.
Fuentes oficiales del Departamento de Justicia del Gobierno vasco aseguraron anoche a este periódico que no pueden «confirmar ni desmentir datos concretos» de los presos ni «detalles de un posible permiso» para cuestiones médicas. En todo caso, afirmaron que las salidas de internos «sin custodia policial» están «previstas en la normativa». Se conceden por los «servicios centrales penitenciarios» bajo la «fórmula de permiso extraordinario» si su «situación penal y penitenciaria lo permite». Citan en concreto el artículo 155.4 del reglamento penitenciario.
El objetivo -insisten desde el Departamento- es «concienciar a la población interna para que utilice sus propios recursos en la gestión de sus necesidades de atención médica extrapenitenciaria» y, al mismo tiempo, «racionalizar la utilización de recursos públicos derivados de una custodia policial cuando ésta no es necesaria». Además, apuntan que en el caso de que se hubiese solicitado una patrulla para custodiar a Otegi habría sido un «error» del centro penitenciario o de la Ertzaintza.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.