España y Marruecos escenifican la «nueva etapa» con la Operación Paso del Estrecho

Tras dar por superada una de las mayores crisis diplomáticas de los últimos tiempos, que tuvo su momento álgido con la entrada irregular de unas 10.000 personas a Ceuta de mayo de 2021, ambos países escenifican este domingo la «nueva etapa» bilateral abierta tras el encuentro entre Mohamed VI y Pedro Sánchez en Rabat el pasado 7 de abril.

La Operación Paso del Estrecho (OPE) da el pistoletazo de salida con la inclusión de nuevo de los puertos españoles por parte de Marruecos tras la suspensión durante los últimos dos años debido a la pandemia de la covid-19 y la citada crisis política por la posición española sobre el Sáhara Occidental.

El plan especial de paso se desarrollará en dos fases: del 15 de junio al 15 de agosto será la operación salida y del 15 de julio al 15 de septiembre, la operación retorno. En esta edición, según las órdenes dadas por el monarca alauí a la Fundación Mohamed V de Solidaridad, la OPE volverá a atravesar el Estrecho de Gibraltar por los puertos españoles de Motril (Granada), Almería y Algeciras (Cádiz). Además, entre los 17 lugares que ha habilitado Marruecos se encuentran las entradas de los pasos fronterizos de Ceuta y Melilla, abiertas hace escasos días.

Las principales reticencias están en las ciudades autónomas por las colas kilométricas, de varias horas de espera, que podrían darse para sellar los pasaportes para entrar al país vecino. Una circunstancia que podría hacer replantear los actuales trámites burocráticos de acceso si se convierte en un «caos total», como vaticinan algunos representantes empresariales en Melilla, que recalcan que la OPE genera más trastorno que beneficios a la ciudad autónoma, ya que solo es un tránsito continuo de personas que apenas hacen escala para comer o pernoctar.

Así, los puertos españoles han reactivado la frecuencia de las navieras para trasladar a los pasajeros marroquíes de la OPE a los puertos mediterráneos de Tánger-Med, Tánger-Ville, Alhucemas y Nador. Más de 1.000 médicos, asistentes sociales y voluntarios prestarán apoyo social y sanitario a los viajeros en las paradas de descanso y en los barcos. En este sentido, España establecerá un dispositivo de seguridad para esta edición que contará con 15.995 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil.

Conocida también como Operación Marhaba (bienvenida), la OPE organiza desde 1986 el tránsito de ida y de vuelta de los ciudadanos de origen marroquí que viajan desde países del centro de Europa hasta el norte de África en la época estival. Supone uno de los movimientos de personas entre continentes más numerosos en tan corto espacio de tiempo.

Este año, Marruecos ha programado 32 ferris, con 571 viajes semanales, para cubrir el trayecto entre sus puertos y los de España, Francia e Italia, con una capacidad para 478.000 pasajeros y 123.000 coches. Serán 23 los ferris que operarán en las líneas que unen el país magrebí y España, lo que representa el 95 % del tráfico de pasajeros durante esa operación, 14 de los cuales cubrirán el trayecto principal Tanger-Med - Algeciras. En estas líneas operarán también dos barcos dedicados al transporte de camiones.

Estos barcos realizarán 47 viajes diarios con una capacidad para unos 40.000 pasajeros y 11.000 automóviles, lo que significa un aumento del 4% respecto a 2019. En 2020 y 2021, el Gobierno de Marruecos limitó el retorno de los emigrantes marroquíes a su país al uso de barcos procedentes de los puertos franceses de Marsella y Sète, además del italiano de Génova.

El pasado 12 de abril, los enlaces marítimos entre los puertos de Algeciras y Tarifa con los de Tánger-Med y Tánger-Ville, respectivamente, restablecieron su actividad tras más de dos años de suspensión de las rutas. Asimismo, el pasado 17 de mayo, se reabrieron las fronteras terrestres entre España y Marruecos en las ciudades de Ceuta y Melilla tras el cierre por la pandemia y la crisis bilateral entre los dos países.

En el plano político, Vox se ha quedado solo en el Congreso presentando una iniciativa para cancelar la OPE en España como represalia a los desencuentros con Rabat tras la «agresión» de Ceuta y el «asalto migratorio masivo». La proposición no de ley, de 30 de mayo, pide además suspender cualquier pago o subvención a las autoridades marroquíes, volver a cerrar las fronteras y bloquear o anular la concesión de visados de entrada en Europa a todos los ciudadanos de países emisores de inmigración irregular, como Marruecos, mientras persistan en sus posiciones.